NUEVA YORK, 10 (DPA/EP)

El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) ha condenado este sábado el ataque suicidia en el que al menos quince civiles, entre los que hay varios niños, murieron este viernes en la ciudad de Mozogo, al norte de Camerún.

Cinco niños entre los 3 y los 14 años fallecieron en un atentado que e atribuyó a prsesuntos miembros de Boko Haram, mientras que seis menores de entre 9 y 15 años están gravemente heridos.

La directora de Unicef, Henrietta Fore, ha asegurado que se encuentra profundamente preocupada por el aumento de ataques a civiles en el norte y el oeste de Camerún.

Aproximadamente 3,2 millones de niños se encuentran en situación de vulnerabilidad en el país africano, según Fore.

Camerún ha experimentado un incremento de ataques a civiles desde que las dos regiones anglófonas del país anunciaron su intención de escindirse y formar un nuevo país llamado Ambazonia.

Los anglófonos se han quejado durante mucho tiempo de ser tratados como ciudadanos de segunda clase y recibir menos fondos gubernamentales que la mayoría francófona.