La mayoría de los grupos del Congreso han manifestado su rechazo a la reprobación y cese del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, como piden PP y Vox en sendas mociones al no compartir el principal motivo esgrimido por estas formaciones: la destitución del coronel Diego Pérez de los Cobos.

Durante el debate de ambas mociones consecuencia de interpelación, que se votarán mañana, la diputada de Vox Macarena Olona ha anunciado la presentación por parte de su grupo de una ley "inédita" en la historia de la democracia española que penará con prisión el delito de prevaricación administrativa.

La norma, que según ha dicho Olona la llamará personalmente ley Corbí, en homenaje al coronel de la Guardia Civil Manuel Sánchez Corbí, "el primer empleado público ilegalmente cesado" por Marlaska, regulará la obligación expresa de motivar tanto el nombramiento como los ceses de puestos de libre designación "y protegerá a los servidores públicos".

Su compañero de grupo Ignacio Gil Lázaro ha subrayado que Marlaska es un peligro para la seguridad y la libertad de los españoles, una desgracia para los funcionarios bajo su órdenes y una vergüenza para todos los españoles.

En la defensa de la moción del PP, Ana Belén Vázquez ha pedido el cese de Marlaska porque no tiene dignidad para dimitir, porque "ha pasado de abrazar a las víctimas del terrorismo a despreciarlas" con acercamientos de presos de ETA, por las "órdenes para controlar las redes sociales y las críticas al gobierno", por su "fracaso" en la política migratoria, por el "cese arbitrario e ilegal" de Pérez de los Cobos y por "la patada en la puerta", entre otros motivos.

Vázquez ha dibujado a un Marlaska "arrodillado", "sectario", "arbitrario" y "soberbio", al que va a costarle muy caro haber pretendido "ganarle un pulso" a la Guardia Civil, lo que, a su juicio, "va a costarle muy caro" porque ni este Cuerpo ni la Policía "se van a someter nunca a sus caprichos".

"Si Marlaska no sabe conjugar el verbo dimitir, le exigimos a Sánchez que conjugue el verbo cesar", ha pedido la diputada del PP.

El diputado del PSOE Santos Cerdán ha considerado que esos ataques tienen como objeto tapar las propias miserias del PP, un partido para el que, ha dicho, "la hemeroteca es nefasta", mientras que su compañera de bancada Sonia Ferrer ha advertido a Vox de que "cada vez que alguno de los suyos se abre la camisa para mostrar el tatuaje de 'yo soy muy español' consiguen oleadas y oleadas de nuevos nacionalistas".

Al PP le ha reprochado la diputada socialista que hablen de manejos en el Ministerio del Interior cuando su gobierno creó "una mafia policial", llamada policía patriótica.

La diputada de Unidas Podemos Sofía Fernández Castañón ha criticado que el PP y Vox pretendan patrimonializar a la Guardia Civil y a la Policía "cuando han de ser de todos".

El PNV, ERC y Bildu se han mostrado en contra de ambas mociones no por no estar de acuerdo con el cese de Marlaska sino por discrepar con los motivos que tanto PP como Vox argumentan para pedir la destitución del ministro del Interior.

Por su parte, Ciudadanos ha considerado que "hay motivos más que suficientes" para votar a favor de la reprobación y para exigir a Sánchez que "le cese con carácter de urgencia".