El pronunciamiento sobre la suspensión de los cuatro diputados presos que han hecho los partidos con representación en la Mesa del Congreso ha provocado la primera discrepancia de la legislatura entre dos llamados a entenderse, PSOE y Unidas Podemos, ya que la formación de Pablo Iglesias se ha quedado sola en su oposición a la decisión.

Tal y como han constatado a Efe fuentes parlamentarias conocedoras de la reunión, PSOE, Cs y PP se han expresado a favor de proceder a la suspensión automática de los diputados catalanes en prisión preventiva. No ha sido el caso de Unidas Podemos.

La presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha omitido emplear la palabra "votación", pero, como ha destacado la vicepresidenta tercera, Ana Pastor, en una comparecencia posterior ante los medios, si los partidos de la Mesa se pronuncian a favor o en contra de una medida, eso es votar.

Así que de los nueve miembros de la Mesa, siete habrían estado a favor de la suspensión automática (tres del PSOE, dos del PP y dos de Cs) y dos en contra (Unidas Podemos).

La propia Batet ha explicado en sus declaraciones a la prensa que la oposición de los dos integrantes de la formación "morada" y de sus confluencias, Gloria Elizo, vicepresidenta primera, y Gerardo Pisarello, secretario primero, ha obedecido a los tiempos manejados para tomar la decisión de suspender a Oriol Junqueras, Jordi Sànchez, Jordi Turull y Josep Rull.

De acuerdo con su versión, Unidas Podemos ha considerado precipitado tomar la decisión este viernes sin tiempo para estudiar el informe con más detenimiento.

La portavoz de Unidas Podemos, Irene Montero, ha negado que esa posición diferente implique un "quiebro de la confianza" que pudiesen llegar a tener con el PSOE, cara a un posible pacto de coalición.

"Mostrar una posición discrepante en un asunto concreto de la Mesa del Congreso no cambia la necesidad de que exista en España un Gobierno de coalición y progresista", ha reiterado.

La posición discrepante de ambos partidos en la Mesa de la Cámara Baja se ha producido en el día en el que el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, ha afirmado en una entrevista a Efe que es de "sentido común" pensar que será ministro en un hipotético Gobierno de coalición liderado por Pedro Sánchez.