Sociedad Civil Catalana (SCC) ha dado por cerrada la polémica interna en la entidad, que derivó en el cese de su expresidente, José Rosiñol, que este lunes ha negado cualquier irregularidad en la gestión: "Y si quien de forma anónima filtró esta información falsa lo quiere, nos vemos en el juzgado".

"Estoy muy tranquilo", ha asegurado durante la rueda de prensa que ha protagonizado junto al nuevo presidente de la asociación contraria a la independencia de Cataluña, Josep Ramon Bosch, y Álex Ramos, que ha llevado las riendas de la entidad desde que el pasado 20 de diciembre se apartara a Rosiñol.

Rosiñol ha comparado las riñas que hubo en la asociación con "las que hay en cualquier familia u organización", y ha rechazado profundizar en ellas para no "alimentar" una polémica surgida a raíz de "filtraciones interesadas y falsas".

"Las cuestiones internas son internas. Lo anormal fue que se hicieran públicas informaciones falsas. Siempre hemos discutido mucho y hemos llegado a consensos", ha agregado.

Como prueba de esa inexistencia de irregularidades, el anterior presidente de la entidad y su sucesor desde que le cesaran el pasado 20 de diciembre, Álex Ramos, han exhibido la amplia mayoría con que se han aprobado los informes de gestión relativos a los ejercicios 2017 y 2018, así como las cuentas de 2017.

"El objetivo de mi presidencia fue encontrar el camino de salida al conflicto que tenemos entre catalanes", ha subrayado Rusiñol, que ha sugerido que en algunos sectores de la entidad discreparon de su estrategia dialogante.

Por su parte, el nuevo presidente de la entidad, que ya estuvo al frente de la misma entre 2014 y 2015, ha subrayado que no era su intención volver a liderar SCC, pero que se sintió interpelado a ello cuando muchos de los asociados le pidieron que diera un paso al frente.

Sobre su estrategia de cara al futuro, Bosch ha indicado que seguirá apostando por una solución dentro de la ley y fundamentada en el diálogo para el conflicto catalán.

"Tenemos que hablar, no se puede seguir con la situación de enfrentamiento y crispación", ha defendido Bosch, que ha detallado que trabajará para articular "un relato potente" que consiga que "un 20 o 25 % de nacionalistas que se han movido al independentismo regresen".