El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha avanzado hoy un mayor control y transparencia de los organismos reguladores, así como el impulso de canales de denuncia anónima por parte de los empleados que detecten algún tipo de conducta no ética o ilegal en su compañía.

Sánchez ha expresado su predisposición a adoptar esas decisiones en el acto de entrega a IAG del I premio Manuel Olivencia al Buen Gobierno Corporativo.

En su intervención ha asegurado que el Gobierno reforzará el papel de los organismos reguladores y supervisores de los mercados como la CNMC, la CNMV y el Banco de España para que cumplan su función de la forma más eficiente posible.

Para él, es fundamental la autonomía e independencia de estos organismos, una independencia que ha dicho que debe empezar por la elección de los miembros del consejo de los reguladores.

"El Gobierno quiere avanzar en el procedimiento de designación de sus miembros incrementando la transparencia y también la publicidad de acuerdo con las mejores prácticas de los países del entorno de España", ha añadido.

Sánchez ha explicado que "no se trata de realizar estos cambios sólo por justicia o por sentido del deber, sino también porque los beneficios potenciales de lograr esta garantía de independencia son considerables desde muchos puntos de vista".

Sánchez ha resaltado que España ha vivido momentos muy difíciles por culpa de la corrupción o la falta de ejemplaridad con delitos cometidos muchas veces al amparo de la opacidad que han puesto en riesgo el vínculo esencial entre ciudadanía e instituciones que sostienen la democracia.

Por ello, ha insistido en que se necesita reforzar la transparencia de todos los organismos públicos y es esencial que los organismos reguladores rindan cuentas y sean transparentes ante el Ejecutivo, el legislativo y las entidades reguladas.

El jefe del Ejecutivo se ha referido también a la necesidad de seguir dando pasos para eliminar la discriminación laboral de la mujer, y en ese contexto ha subrayado que el Gobierno tiene la intención de acelerar la aprobación de la ley de igualdad laboral que se encuentra en trámite parlamentario.

Su aprobación ha explicado que no sólo pretende combatir la brecha salarial entre hombres y mujeres, sino también elevar la representación de las mujeres en los consejos de administración de las empresas.

En ese contexto, ha considerado que el buen diseño de las instituciones y el respeto a las mismas es una condición esencial para el crecimiento sostenible a largo plazo.

"Debemos establecer un marco sistemático que sea coherente, ordenado y basado en estándares internacionales y que favorezca el seguimiento por parte de quienes deben velar por el funcionamiento de nuestras instituciones", ha añadido.

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Aunque ha subrayado que se ha avanzado en este ámbito, ha dicho que hay que seguir trabajando para ello y ha explicado que el Gobierno pretende hacerlo por dos vías.

La primera de ellas incorporando principios de buen gobierno público en el sector público fundacional y empresarial, en los organismos autónomos, en las entidades públicas empresariales y en las agencias estatales.

A su juicio, es una medida necesaria para luchar contra la corrupción y las malas prácticas.

Por ello, ha anunciado que el Gobierno va a impulsar el desarrollo de códigos éticos internos y potenciar los canales de denuncia anónima por parte de los empleados que detecten algún tipo de conducta no ética o ilegal en su compañía.

El Gobierno propondrá también la presentación anual de informes de gobierno corporativo así como las memorias de sostenibilidad, con especial atención a la igualdad real entre hombres y mujeres y a la plena integración de las personas con discapacidad.

Sánchez ha aprovechado para lanzar un mensaje de confianza en la economía española y para defender el borrador de presupuestos para 2019 enviado a Bruselas.