Los exconsellers Josep Rull y Jordi Turull han denunciado este jueves que el Gobierno "pretendidamente progresista" de Pedro Sánchez se mantenga "absolutamente indiferente" ante la "infamia" que creen que supone la retirada del tercer grado.

Turull y Rull han sido recibidos esta tarde por una delegación de JxCat y de ERC, además de otros ciudadanos, en la entrada de la prisión de Lledoners (Barcelona) antes de ingresar para ya no poder volver a salir diariamente, después de que el juzgado de vigilancia penitenciaria les haya retirado el tercer grado provisionalmente, a petición de la Fiscalía.

En declaraciones a los periodistas, Rull ha denunciado que "la fiscal general de un partido pretendidamente progresista -Dolores Delgado- y un gobierno español pretendidamente progresista permanezcan absolutamente indiferentes ante esta infamia en términos democráticos" y ha añadido: "Esto es una auténtica vergüenza".

EL exconseller ha alertado que, "cuando las togas toman el control de todo sin un mecanismo del contrapoder democrático, es el fin de la democracia en sí misma".

No obstante, ha admitido que ve "un punto de luz" en el hecho de que otro juzgado penitenciario, en este caso el que ha abordado los casos de la expresidenta del Parlament Carme Forcadell y la exconsellera Dolors Bassa, no haya acordado la suspensión provisional del tercer grado para ellas.

Conforme con esta decisión, Rull ha lamentado que las cosas "bien hechas" sean, a su juicio, "la excepción" en este ámbito de la justicia.

Turull, que ha suscrito las declaraciones de Rull, se ha dirigido un momento a los congregados para pedir que el soberanismo vaya "a la una" y que no "afloje": "Esto va de venganza y escarnio. Lo han probado durante siglos, pero no lo lograrán", ha exclamado. EFE