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La presidenta del PSOE, Cristina Narbona, ha asegurado este lunes que la delegación del Gobierno en la mesa de diálogo sobre el conflicto catalán cumple lo pactado con ERC, pero no ha aclarado si ocurre lo mismo con la representación de la Generalitat, que incluye miembros que no están en el Govern.

En rueda de prensa al término de la Ejecutiva Federal y a la pregunta de cómo valora el partido la primera propuesta de la Generalitat de colocar en la mesa a huidos de la justicia o encarcelados, Narbona no ha querido valorar "algo para lo que todavía hay margen hasta que quede resuelto".

La delegación catalana liderada por el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y el vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, contará con los consellers Jordi Puigneró y Alfred Bosch y los diputados -que no forman parte del Govern- Elsa Artadi, Marta Vilalta y Josep Maria Jové, además de Josep Rius, exjefe de gabinete de Carles Puigdemont y Quim Torra.

En un principio, Torra sugirió que Carles Puigdemont, Oriol Junqueras, Marta Rovira y Jordi Sánchez también estuvieran en la mesa de negociación.

La delegación del Gobierno, encabezada por Pedro Sánchez, está integrada por los vicepresidentes Carmen Calvo y Pablo Iglesias, y los ministros Carolina Darias, Salvador Illa y Manuel Castells.

Pese a las reiteradas preguntas de los periodistas, Narbona ha dejado claro que la Ejecutiva del PSOE no ha entrado a valorar la delegación catalana porque eso "corresponde al presidente".

Y ha incidido en que quedan aún "dos días" para saber cual es la composición final de la mesa por parte del Govern.

"Dejemos que llegue el momento de la celebración de la mesa y veamos cual es finalmente esa composición", ha dicho.

Narbona ha dicho que "confía plenamente" en el liderazgo del presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, ha avanzado que la mesa tratará en principio asuntos fáciles para abordar más adelante otros temas complejos y ha fiado a largo plazo, incluso más allá de la legislatura, la consecución de "acuerdos satisfactorios".

La presidenta del PSOE ha admitido que el proceso será "dilatado en el tiempo pero vale la pena" y ha remarcado que "sólo los socialistas" están en condiciones de liderarlo.

En definitiva, ha reconocido que se trata de un "desafío que merece una legislatura y más allá porque es de una enorme complejidad" y ha apelado a la "voluntad" de ambas partes para que la mesa de dialogo se ponga en marcha.

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"Por parte del Gobierno de España esa voluntad está asegurada", ha subrayado.

Narbona también se ha referido "a los diez años de desencuentros" del Estado con Cataluña y ha reconocido que las cuestiones que aborde la mesa "no se resuelven en una, dos o tres reuniones y quizá tampoco en 20 o 30", ha dicho.

La dirigente socialista ha explicado que "de entrada" se pondrá sobre la mesa las cuestiones de la agenda para el reencuentro (muchas referidas a inversiones e infraestructuras que están pendientes) y más adelante se pasará a los asuntos más complejos.

Narbona ha reiterado que el camino es el diálogo dentro de la ley y "el empeño es de enorme envergadura y puede ir más allá de los límites de una legislatura, pero ojalá no sea así".