El presidente de Melilla, Eduardo de Castro, ha mostrado este lunes su respaldo a la decisión del Ministerio del Interior de retirar las concertinas del perímetro fronterizo entre España y Marruecos en la ciudad autónoma porque considera que estos elementos "generan un doble problema" por su carácter lesivo.

A preguntas de los periodistas, De Castro ha dicho que, por esa razón, él no es partidario de las concertinas como método disuasorio frente a los intentos de entrada irregular, habida cuenta de que "al que quiere saltar (la valla) le da igual que haya concertina porque lo va a hacer y la prueba está en que se hace".

De hecho, ha recordado una vez que el Hospital Comarcal de Melilla "se colapsó precisamente por esto", dadas las heridas que sufrieron inmigrantes que saltaron la valla y sufrieron heridas provocadas por las concertinas, por lo que ha saludado su retirada porque "evitará gente lesionada".

El presidente melillense considera, además, que "vivimos otros tiempos y hay métodos mucho más modernos y eficaces" para impermeabilizar el perímetro fronterizo más allá de la concertina, sobre la que ha recordado que queda "poca" en la valla fronteriza de Melilla.

De Castro ha explicado que el pasado viernes recibió la noticia del comienzo este mismo mes de las obras en el perímetro fronterizo por una llamada del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien le informó de que estas actuaciones se iniciarían "de forma inminente".