El presidente de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), Manuel Almenar, ha advertido hoy de la tendencia que hay en España y en Europa de ir hacia una "partitocracia" que, a su juicio, es un auténtico "caldo de cultivo" para la corrupción política.

Manuel Almenar ha pronunciado estas palabras durante su conferencia en el curso de verano de la Universidad Complutense de Madrid sobre Justicia y Política, celebrado en San Lorenzo de El Escorial y organizado por la APM, la asociación mayoritaria de jueces.

El presidente de la APM cree que los partidos están desvirtuando la separación de poderes hasta el punto que "la democracia se ha convertido en una partitocracia en la que los partidos tienden a repartirse toda la organización social para controlar a la sociedad".

Ha abundado en que los partidos están instaurando "un sistema sin frenos que monopoliza todo el poder y que es el caldo de cultivo de todo tipo de corrupciones, y esa es la tendencia en España y en toda Europa".

Almenar observa que "los partidos políticos están colonizando el Estado confundiendo lo público y lo privado y el paso siguiente es domesticar a la sociedad con subvenciones y ayudas" a distintas entidades entre las que ha mencionado a los medios de comunicación y también a órganos de control como el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el Tribunal Constitucional o el Banco de España.

En este contexto Almenar ha asegurado no obstante: "Los jueces en España somos rabiosamente independientes" y, al respecto, ha recordado que se han dictado sentencias condenatorias a políticos de todo signo.

De todas formas Manuel Almenar ha planteado diversas propuestas para reforzar la independencia judicial.

A su juicio habría que ampliar las competencias del CGPJ en cuanto a las medidas que puede adoptar ante ataques a jueces ya que ahora solo se limita a concederles meros amparos que no tienen ningún efecto.

Almenar considera que el hecho de que los veinte vocales del CGPJ sean elegidos por las Cortes traslada la lucha partidista al órgano de gobierno de la judicatura por lo que defiende volver al sistema por el cual los jueces elegían a los doce consejeros de procedencia judicial y los ocho juristas eran elegidos por el Parlamento.

Igualmente ha propuesto la creación de un código deontológico para cargos públicos que determine el momento en el que deben apartarse de su puesto ante una investigación sin que ello signifique que sea culpable.

También ve necesario buscar mecanismos para impedir filtraciones interesadas de los sumarios y los juicios paralelos, además de mejorar la regulación de la acción popular para que no se haga un mal uso de esta forma de acusar en los procedimientos judiciales y evitar que se intente por la vía penal lo que no se consigue en las elecciones frente a un rival político.

Almenar considera que los jueces deben contar con agentes de las Fuerzas de Seguridad que dependan únicamente de ellos ya que ahora los policías nacionales y los guardias civiles que participan en investigaciones judiciales tienen una doble dependencia, y se ha preguntado: ¿A quién dan cuenta, al juez o al Gobierno de quien dependen?.

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Igualmente cree que hay que regular la vuelta a la carrera judicial de jueces que han asumido cargos políticos impidiendo el regreso o delimitando a qué puestos de la carrera judicial pueden o no reintegrarse.