Las autoridades sanitarias de Portugal han notificado 9.927 nuevos casos de coronavirus en las últimas 24 horas, el segundo peor dato de toda la pandemia --por detrás del confirmado el miércoles--, lo que ha llevado al primer ministro, António Costa, a reconocer que "probablemente" será necesario adoptar nuevas restricciones.

Portugal ha sumado unos 20.000 nuevos positivos en solo dos días y acumula 456.533 casos desde el inicio de la pandemia de COVID-19. La Dirección General de Salud estima que 7.472 enfermos han perdido la vida, 95 más que el miércoles.

La región Norte y la de Lisboa y Valle del Tajo, con 3.554 y 3.501 positivos, respectivamente, se reparten la mayoría de los nuevos contagios, si bien también se han registrado 1.855 en la zona Centro.

El repunte de los contagios sería atribuible a la relajación de las medidas durante las fiestas de Navidad, algo "previsible" en opinión de Costa. El primer ministro no descarta la posibilidad de adoptar "medidas de confinamiento más generales", similares a las de marzo, si la situación se desborda.

En este sentido, ha dicho que prefiere esperar a un análisis al detalle de los datos la próxima semana, durante una reunión de expertos prevista en principio para el día 12. "Probablemente tendremos que adoptar medidas más restrictivas", ha admitido el dirigente luso.

Costa, que se ha mostrado partidario de mantener abiertos los centros educativos en futuros escenarios, ya ha confirmado este jueves una ampliación de las restricciones a la circulación entre municipios y del toque de queda. No obstante, ha aclarado que se mantiene la convocatoria de elecciones presidenciales el 24 de enero.