El inspector a cargo de las pesquisas sobre el entramado societario del excomisario José Manuel Villarejo ha cerrado filas en torno a la investigación realizada por Asuntos Internos, cuestionada desde el principio por las defensas, quienes han protestado en más de una ocasión por las preguntas del fiscal.

La Audiencia Nacional ha iniciado este jueves la fase testifical del juicio del caso Tándem por tres presuntos encargos de espionaje con la declaración del inspector que dirigió la investigación policial que ha acabado sentando en el banquillo a Villarejo, que acusa a la Unidad de Asuntos Internos de manipular informes en su contra.

Con su interrogatorio -que se prolongará más jornadas-, la Fiscalía ha buscado acreditar la legalidad de las diligencias practicadas, impugnadas por las defensas, que no han dudado en protestar cuando pensaban que el fiscal estaba induciendo al testigo con sus preguntas, y que han conseguido que el tribunal le llamase la atención más de una vez.

El inspector ha realizado un minucioso relato de todos los pasos dados por su unidad y ha mencionado documentos hallados sobre Villarejo, como uno que informaba de sus funciones policiales, recibís de pagos de fondos reservados, y también documentación "relacionada con las identidades supuestas u operativas asignadas por la Secretaría de Estado de Seguridad".

Preguntado sobre si encontraron sociedades del excomisario ajenas a Cenyt -la estructura empresarial sobre la que pivota esta causa- para realizar funciones policiales, el inspector ha explicado que ese entramado era "de carácter familiar" y ha añadido: "Si el Estado necesita constituir una sociedad con una identidad supuesta, lo hace, y, efectivamente, Villarejo constituyó una con una identidad supuesta de la Secretaría de Estado de Seguridad".

El inspector ha tratado de dar garantías de las actuaciones de su equipo, incluidos los registros que han impugnado la mayoría de las defensas, y ha asegurado que se siguieron "los mismos criterios" que en cualquier otra investigación y con un "control judicial especialmente exhaustivo" de los efectos intervenidos.

Sin embargo, en la bancada de las defensas se han levantado las sospechas cuando ha indicado que los guardaron en una caja fuerte de la unidad y él se quedó la llave a la espera de que la Audiencia Nacional les convocasen para entregarlos.

El inspector ha señalado que Asuntos Internos investigó años antes las empresas de Villarejo al tener indicios de un posible blanqueo, pero el asunto acabó archivándose; ya en 2017 comenzó la investigación del caso Tándem tras una denuncia anónima y se centró en un principio en otro proyecto, denominado King, que no es objeto de este juicio, como ha advertido varias veces el tribunal a Anticorrupción.

El testigo ha explicado cómo los agentes acabaron dando con una maraña societaria con ramificaciones internacionales que siempre conducía a Villarejo, a quien ha señalado como "el titular real" de Cenyt pese a no aparecer en sus órganos de administración.

También ha recordado que hallaron una operación de repatriación de un millón de euros de Panamá y Uruguay, y que las sociedades llegaron a acumular "muchos inmuebles" y "más de 100 cuentas bancarias".

Y entre las cosas que le llamaron la atención ha mencionado que Cenyt se llegó a definir como una "unidad de inteligencia" con "estrechas relaciones institucionales y operativas" con las Fuerzas de Seguridad y la Administración de Justicia.