Pacha volvió a abrir sus puertas en Ibiza el pasado 4 de mayo con una fiesta de inauguración que ha acabado en la Fiscalía. Según los vídeos y fotografías que se tomaron esa madrugada, dos de los gogós de la famosa discoteca regularon el tráfico vestidos de policía. Los «agentes» cortaron el tráfico de la Avenida 8 de agosto para que los invitados pudiesen cruzar sin esperar el semáforo de peatones. Los dos bailarines llevaban para esta acción un uniforme similar al de la policía local de Ibiza, al que no le faltaba ni unos grilletes. Una vez dentro del local, los mismos falsos policías se subieron a las tarimas reservadas a los gogós, y trataron de parar la música y desalojar el local entre silbidos de los asistentes. Luego, se pusieron a bailar.

Agentes reales de la Policía Local de Ibiza elaboraron un informe sobre este incidente que trasladaron al Ayuntamiento. Ahora, la Fiscalía de Ibiza estudiará si la discoteca pudo haber incurrido en algún tipo de delito. El Código Penal, en su artículo 402, dice sobre la usurpación de funciones públicas y el intrusismo que «el que ilegítimamente ejerciere actos propios de una autoridad o funcionario público atribuyéndose carácter oficial será castigado con la pena de prisión de uno a tres años». Y en el 402 bis dice que «el que sin estar autorizado usare pública e indebidamente uniforme, traje o insignia que le atribuyan carácter oficial será castigado con la pena de multa de uno a tres años».

Desde el Grupo Pacha se asegura que los uniformes no eran de verdad, sino un disfraz de la empresa de animación del local. La discoteca también denunciada esa misma madrugada por incumplir el horario de cierre.