Fue en junio de 2020. La Policía Nacional estaba participando en la operación Gestalt, una de las mayores intervenciones en el mercado negro de armas llevadas a cabo en nuestro país. Las Fuerzas de Seguridad se incautaron de más de setecientas armas. Una macroperación simultánea en Málaga, Tarragona, Burgos, Madrid, Cuenca y Lugo en la que participaron hasta doscientos agentes y que se saldó con veintiún detenidos.

Sin embargo, durante aquella operación, los agentes encontraron una pieza de gran valor en uno de los puntos donde se desmantelaron diversas armas. Concretamente fue en un barrio de Madrid, en el domicilio de un coleccionista que guardaba más de trescientas piezas entre pistolas, revólveres, automáticas y semiautomáticas. Una de aquellas armas perteneció a una figura histórica: el hombre que informó, con rostro consternado y voz temblorosa, de la muerte de Francisco Franco.

El tesoro descubierto en la operación Gestalt

Parte de aquel arsenal de armas en Madrid se encontraba guardado en una gran caja fuerte. En la parte interior y envuelta en en un paño, la Policía descubrió un revólver Astra, empresa fundada en 1908 en Guipúzcoa (País Vasco). El arma tenía un tambor con una capacidad para un total de seis balas, burilado y con damasquinados con un lustroso baño en plata de la marca Star.

Tras descubrir aquel revólver, los agentes de la Policía se dispusieron a pedir explicaciones al detenido y, por aquel entonces, también el dueño del mismo. Éste se dispuso a contarles una historia “que os va a gustar”, aseguró el coleccionista.

Al parecer, el detenido supo de aquel arma tras conocer que una persona había entregado un revólver “incomparable” en el depósito de armas de la Guardia Civil, en la capital. El coleccionista llevó a cabo una investigación propia y finalmente descubrió la identidad de la persona que había depositado aquel revólver.

Se trataba, nada más y nada menos, de una de las sobrinas de Carlos Arias Navarro, presidente del Gobierno de España durante la dictadura franquista y la Transición Española. Al parecer, su sobrina había encontrado el revólver en su casa.

El coleccionista consiguió convencer a la sobrina de Arias Navarro para hacerse con aquel arma. Finalmente cerró un acuerdo para hacerse con ella por tan solo cien euros a mediados del año 2019.

Las características del revólver de Arias Navarro

Una de las características destacables del revólver era, precisamente, que estaba completamente personalizado, en color dorados y varios relieves decorativos como, por ejemplo la imagen del Águila de San Juan, la famosa águila que aparecía en la bandera de España durante la dictadura de Francisco Franco. Asimismo, se puede apreciar un grabado que hacía creer que el expresidente se pudo hacer con el revólver durante los años en los que estuvo al frente de la Dirección General de Seguridad. Según parece el arma estaba en perfectas condiciones dispuesta para disparar en cualquier momento. Por su estado apenas se había llegado a utilizar.

Arias Navarro siempre se caracterizó por ser apolítico y nunca confió en nadie. Ni falangistas, ni democristianos ni monárquicos. Ese podría haber sido uno de los motivos por los que contaba con aquel arma en su poder: defenderse de todos aquellos que podían poner en peligro su vida.

El hombre que se hizo con la pistola del expresidente estaba muy estrechamente relacionado con El Boquerón, un conocido delincuente malagueño de 30 años, cargado de antecedentes por narcotráfico y la venta ilegal de armas. “Miembros de otras organizaciones delictivas o coleccionistas le pedían cualquier tipo de armas y él se encargaba de buscarlas y conseguirlas”, explicaron en su momento los agentes que participaron en la investigación.