El pleno del Parlament ha aprobado hoy tramitar una ley impulsada por PSC-Units que propone multar a quienes utilicen "expresiones ofensivas, vejatorias o atentatorias" contra las víctimas de la Guerra Civil o la dictadura, o bien exalten "la revuelta militar o el franquismo".

Así consta en la proposición de ley de memoria democrática de Cataluña que ha presentado hoy en el pleno el portavoz adjunto del grupo socialista, Ferran Pedret, y que iniciará la tramitación parlamentaria después de que los grupos que apoyan al Govern -JxCat y ERC- hayan retirado las enmiendas a la totalidad que habían presentado.

Las sanciones que constan en la proposición de PSC-Units van desde los 200 hasta los 150.000 euros, dependiendo de la gravedad de la infracción.

Entre éstas, constan como "muy graves" -sanciones comprendidas entre los 10.001 y los 150.000 euros- la destrucción de fosas de víctimas, la celebración de actos públicos que conlleven "descrédito o humillación" de las víctimas o sus familias, así como los homenajes o distinciones a personas que apoyaron la dictadura.

La proposición de ley socialista se tramitará en paralelo a los trámites iniciados por el Govern para acordar una ley integral de memoria democrática que aglutine toda la normativa previa, circunstancia por la cual JxCat y ERC habían presentado enmiendas de retorno, que finalmente han retirado para permitir su debate.

Otros aspectos que comprende la iniciativa de PSC-Units son declarar el 31 de mayo como día de recuerdo y homenaje a las víctimas de la Guerra Civil y el franquismo, crear una Comisión de la Verdad -como ya recoge la propuesta del ejecutivo catalán- o fijar un plazo de seis meses para retirar toda la simbología franquista.

En su intervención, Pedret ha considerado que se debería "fundir" en una sola ley toda la normativa sobre memoria histórica ya aprobada en Cataluña y ha considerado que "mirar al pasado es necesario" para garantizar que en el futuro no se vuelvan a producir hechos similares.

Matías Alonso, de Ciudadanos, ha lamentado que el PSC-Units vuelva a "mirar al pasado" y ha asegurado que esta iniciativa es "una maniobra de distracción" para que no se hable del "desgobierno de los amigos" del expresident Carles Puigdemont y de "la persistencia en su intento de golpe a la democracia".

Un mensaje similar al que ha lanzado Xavier García Albiol (PPC), que ha afirmado que la proposición de ley de los socialistas "equipara las valoraciones subjetivas de la memoria con el transcurso objetivo de la Historia".

El diputado de Catalunya en Comú Podem Joan Josep Nuet ha celebrado que hablar de memoria sea "un punto de encuentro de los republicanos", mientras que Vidal Aragonés, de la CUP, ha reclamado una "exaltación y glorificación absoluta de los que lucharon contra el franquismo".

El presidente de la Generalitat, Quim Torra, también ha tomado la palabra para replicar a Albiol que "un pueblo sin memoria es un pueblo sin acceso a la verdad", y ha añadido: "Ahora que la queremos recuperar no se nos puede acusar de querer manipularla".

Albiol, acto seguido, ha contestado al president: "Cómo quiere que le tengamos confianza para hacer una descripción equilibrada de la Historia si estamos viviendo la evidencia de que ustedes son capaces no solo de reescribir la Historia sino de inventarse el presente".