El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ha opinado este lunes que las declaraciones de algunos líderes sindicales y políticos le hacen ser "un poco malpensado" y le llevan a creer que hay gente que está haciendo una "instrumentalización" de la pandemia para "erosionar y atacar a las recién creadas instituciones vascas".
"Parece que algunos no se han quedado satisfechos con lo que pasó el 12 de julio -en las elecciones autonómicas-, no les ha gustado lo que la gente ha decidido y quieren empezar ya, desde ahora, el acoso y derribo", ha dicho Ortuzar en una entrevista concedida a Onda Vasca.
En su opinión, en este contexto resulta "difícil de entender" que "la actitud positiva, de mano más tendida o de mayor comprensión" de estos sectores hacia las instituciones navarras "no la haya" también hacia las de la Comunidad Autónoma Vasca.
"Lo que tiene que entender la oposición y en concreto la izquierda abertzale en este país -ha añadido- es que los números son los que son. Hay una aritmética, y si quiere negociar estaremos dispuestos a negociar hasta el último segundo, y además con la mano tendida y con una vocación de amplitud de miras, dispuestos a dejar pelos en la gatera, pero si en el último segundo no hay acuerdo, votaremos. Y la votación saldrá con mayoría absoluta del Parlamento Vasco y con toda la legitimidad del mundo", ha recalcado.
"Ese es el cambio sustancial con respecto a la legislatura anterior. La izquierda abertzale tiene que entender que la mayoría absoluta está de parte el Gobierno", ha zanjado.
Ortuzar ha aludido en este punto a la diferente posición política que la izquierda abertzale mantiene en el Congreso de los Diputados respecto a la que tiene en el País Vasco. "No sé qué tiene la moqueta madrileña o los ambientadores del Congreso, porque allí los dirigentes de la izquierda abertzale respiran y espiran otro aire al hablar", ha dicho.
Una situación favorecida, a su entender, por el hecho de que la izquierda abertzale "en gran medida necesita ese altavoz y ese plató de televisión para blanquear su posición política y dar a conocer la nueva". "Luego en casa, en Euskadi, siguen siendo los de siempre y dando las mismas patadas y zancadillas que siempre", se ha lamentado. EFE