El consejero de Cultura de Castilla y León, Javier Ortega, considera que dejar la tauromaquia fuera del bono cultural que ha anunciado el Gobierno se hace en "clave ideológica" porque se trata de una manifestación cultural protegida y un patrimonio "de todos".

Ortega, en declaraciones a Europa Press, ha señalado que el bono cultural anunciado por el Ejecutivo central tiene algunas cosas "peculiares", como el hecho de que se fije la edad de 18 años en lugar de un arco de edad mayor, algo que debería hacerse si se quiere incentivar la cultura, por lo que entiende que tiene "más una intencionalidad política" que de "real" de incentivación de consumo cultural.

Además, ha criticado que deje fuera lo que se supone que son "manifestaciones culturales protegidas" porque "son patrimonio", están declaradas Bien de Interés Cultural (BIC) como es la tauromaquia.

"Se hace en clave ideológica totalmente porque una persona puede querer ir o disfrutar de esa manifestación cultural y se deja fuera de ese bono en función de una decisión política", ha señalado Javier Ortega, quien cree que podían haberse dejado fuera otras cosas porque puede haber gente que le guste la ópera o no o lo mismo puede ocurrir con el cine.

En este caso, como manifestación cultural, "y además patrimonio de todos", se la deja fuera de poder asistir y poder consumir ese bono en esa actividad, con lo que no lo ve "muy lógico".

Ortega ha recordado que la Consejería de Cultura ha apoyado la tauromaquia, "no sólo con palabras, sino también desde el punto de vista económico", y también desde la base, a través de los novilleros, al igual que se ha apoyado a un sector como el de los ganaderos, que por la COVID lo "pasaron muy mal".

El consejero ha apuntado que este apoyo a la tauromaquia no se ha producido sólo en Castilla y León, sino también en comunidades como Extremadura, Castilla-La Mancha o Andalucía, que tienen "gran tradición taurina", por lo que entiende que haya personas que se sientan "perjudicadas o lesionadas" en su derecho de poder acceder a ese bono, en caso de que finalmente sea así, y comprende también el "malestar" entre los aficionados del mundo taurino.