La ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, ha considerado que la jornada de mañana, elegida para la exhumación de Franco, será un día grande para la democracia, porque para este país cerramos una pagina del pasado.

En declaraciones a los periodistas en Alcalá de Guadaíra (Sevilla), Montero ha dicho que, con la exhumación del dictador, afianzamos nuestra democracia, citando que muchas personas se alegrarán de que la única democracia occidental que tenía un mausoleo dedicado a su dictador en estos momentos, va a proceder a la exhumación de esos retos y su traslado a un lugar normal, a enterrarlo al lado de su señora.

Ha dicho que toda la tramitación ha sido una tarea complicada para el Gobierno, superando muchos obstáculo que nos han ido poniendo tanto la familia como algunas asociaciones que defendían la memoria franquista, para indicar que, ahora, hay que trabajar en la memoria democrática de muchas personas que todavía duermen en las cunetas.

Es importante para la historia de España, pero internacionalmente también es un reconocimiento a nuestro país, ha dicho, rechazando las criticas de oportunismo vertidas por el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, del que ha dicho que algunas veces parece que la supuesta izquierda de este país ni siquiera se alegra de aquello que permite ser felices a las víctimas, y restaurar algunas heridas de aquellos cuyos familiares murieron asesinados por el dictador.