El exabogado de Podemos que ha denunciado la presunta financiación ilegal en el partido, José Manuel Calvente, declara este jueves como testigo ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón en el caso Dina, sobre el supuesto robo del móvil a una exasesora de la formación, después de que él lo calificara de "montaje".

El fiscal jefe anticorrupción, Alejandro Luzón, ha decido sustituir él mismo a los dos fiscales del caso al frente de este interrogatorio, al que Calvente responderá por videoconferencia desde Barcelona, donde reside, han informado a Efe fuentes jurídicas.

Las fuentes consultadas han explicado que el motivo de que Luzón haya decidido sustituir solo mañana a los dos fiscales se debe a las implicaciones que puede tener la declaración del exabogado de Podemos.

Calvente fue despedido tras ser acusado por acoso sexual y laboral a Marta Flor Núñez, la abogada de la formación que desde el inicio ha estado representando a la exasesora Dina Bousselham y al líder de Podemos Pablo Iglesias en esta pieza del caso Villarejo.

A esta letrada se la ha relacionado con uno de los fiscales del caso, Ignacio Stampa, al que la Fiscalía de Madrid ha abierto diligencias para investigar si trasladó a Núñez información confidencial sobre esta causa.

García Castellón ha llamado a declarar a Calvente para conocer su versión sobre la actuación de la formación en esta pieza del caso Villarejo y de la que García Castellón expulsó a Pablo Iglesias al retirarle su condición de perjudicado por las dudas que le suscitó su testimonio acerca del destino que le dio a la tarjeta de Dina Bousselham cuando la recuperó tras ser remitida a la revista Interviú.

Calvente, que fue despedido de Podemos el año pasado, señaló en una reciente entrevista a El Mundo, que el caso Dina fue "un montaje".

"El caso Dina era un montaje y como yo podía desmontarlo, me intentaron joder la vida acusándome falsamente de acoso sexual", indicó en la entrevista que concedió días después de que un juzgado de instrucción de Madrid archivase la causa que se abrió contra él por una querella por acoso sexual y laboral de otra abogada del partido, Marta Flor Núñez.

Otro juzgado, el de instrucción número 42 de Madrid, investiga una denuncia del exabogado por presuntos delitos de financiación ilegal, blanqueo de capitales, administración desleal y revelación de secretos en el partido, hechos que dice haber conocido en 2018 y que considera fueron la causa real de su despido.

El líder de Podemos declaró como perjudicado en la pieza Dina poco antes de las elecciones generales de abril de 2019 y le explicó al juez que en 2016, meses después del robo, recibió la tarjeta del móvil de su exasesora de manos del presidente del Grupo Zeta y aseguró que ésta funcionaba, mientras que Bousselham señaló por su parte, que ella no pudo acceder a su contenido.

A lo largo de la instrucción, el juez descubrió que Iglesias le entregó la tarjeta a Dina varios meses después de recuperarla y ya inservible, y a través de una serie de diligencias comprobó que la publicación de las conversaciones de un chat de Podemos en Okdiario se produjo cuando Iglesias ya había recuperado la tarjeta.

Las pesquisas determinaron también que las imágenes que obtuvo ese periódico digital de ese chat fueron pantallazos hechos con el móvil de la exasesora y que ella misma reconoció que envió a otras personas.

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El juez tampoco cree que el excomisario José Villarejo tuviera responsabilidad en ese supuesto robo, ya que la copia de la tarjeta de la exasesora que fue hallada en el registro del domicilio la recibió de manos del exdirector de Interviú, como éste mismo corroboró.

Mientras el juez instruye esta causa, que podría desembocar en una petición de imputación de Iglesias al Tribunal Supremo por estar aforado, el vicepresidente segundo está a la espera de un recurso de apelación contra su expulsión del procedimiento. EFE