Los letrados del Parlament rechazan la celebración de plenos telemáticos porque tanto la normativa como la jurisprudencia constitucional se muestran muy restrictivas con esta posibilidad, y además la cámara catalana no dispone de herramientas para garantizar la participación de los diputados.

Fuentes parlamentarias explican que este documento se debatirá en las reuniones telemáticas de la Mesa y la Junta de Portavoces del parlamento catalán previstas para mañana martes.

Las sesiones no presenciales de estos órganos sí que están avaladas por los letrados del Parlament, que también consideran que hay cobertura jurídica para celebrar sesiones informativas o comparecencias telemáticas de miembros del Govern en comisión, siempre que sea para tratar cuestiones relacionadas con la crisis del coronavirus.

Los servicios jurídicos señalan que sería viable celebrar otro tipo de sesiones en comisión, dado que el número de participantes es limitado, pero lo desaconsejan "por las dudas jurídicas que plantea la actual jurisprudencia constitucional".

En cuanto a las sesiones plenarias, se rechaza su convocatoria de forma no presencial por motivos jurídicos y también porque "el Parlament no tiene, por ahora, como el resto de parlamentos de nuestro entorno, herramientas que puedan garantizar el seguimiento, la participación homogénea y la difusión adecuada de una reunión en modalidad de pleno".

Los letrados recuerdan que la Mesa acordó el pasado 13 de marzo la posibilidad de celebrar plenos fuera del edificio del Parlament "en formato reducido de 21 diputados como máximo", con voto delegado, siguiendo la fórmula usada en la última sesión del Congreso de los Diputados y el Senado.

En caso de que en el futuro se quiera reformar el reglamento del parlamento catalán para habilitar la celebración de plenos telemáticos cuando la técnica lo permita, los letrados destacan que hay una sentencia del Tribunal Constitucional que abre la puerta a que los diputados voten a distancia cuando se dé una situación excepcional.

Con todo, piden que la Mesa del Parlament acuerde la suspensión del período de sesiones hasta que se levante el estado de alarma y que se active la Diputación Permanente, que funciona durante las vacaciones o entre legislaturas. EFE