La Policía de Nigeria ha anunciado este domingo la disolución de un escuadrón policial contra el robo acusado de asesinatos, abusos y extorsión, y objeto de días de multitudinarias protestas de la población para exigir el cese de sus actividades.

"El inspector general de la Policía (Mohammed Adamu) ha ordenado la disolución del escuadrón con efecto inmediato y todos los agentes y hombres que sirven en esta unidad serán redestinados a otros mandos policiales, formaciones y unidades", según ha informado el portavoz de la Policía, Frank Mba, en su cuenta de Twitter.

Asimismo, el portavoz ha anunciado la puesta en marcha de un nuevo modelo de gestión policial para lidiar con los delitos de robo y llenar el vacío de seguridad dejado por la estructura de esta escuadra.

Por último, ha anunciado la creación de una comisión investigadora, integrada en parte por miembros de la sociedad civil, para estudiar los delitos cometidos por los miembros de la organización, "y los culpables serán castigados", ha remachado.

Este anuncio tiene lugar después de que miles de personas volvieran a marchar este sábado para pedir el desmantelamiento de la escuadra especial, conocida como SARS por sus siglas en inglés. El hashtag #ENDSARS ha llenado las redes sociales nigerianas al tiempo que las manifestaciones comenzaban en la mayor ciudad del país, Lagos; la capital, Abuya; y otras ciudades más pequeñas.

El video de integrantes de esta unidad golpeando a un hombre en la ciudad de Ughelli, en el estado de Delta, a 600 kilómetros de la capital, fue el detonante de las manifestaciones que comenzaron el jueves. La Policía nigeriana ha negado que el hombre fuera golpeado hasta la muerte.

Este es el último de lo que los grupos de defensa de los Derechos Humanos han identificado como una serie de abusos llevados a cabo por esta unidad creada en 1992 como un intento de combatir el hurto. Desde entonces, sus miembros han sido acusados de presuntamente llevar a cabo ejecuciones extrajudiciales, torturas y extorsión.

El Centro por el Estado de Derecho y la Rendición de Cuentas ha asegurado en un comunicado que entregó un informe que documentaba abusos por todo el país del SARS, pero que no ha tenido respuesta por parte de la Policía en lo que ha considerado un fallo de Nigeria en su obligación de investigar las quejas de mala conducta policial.

Por su parte, la Policía ha prometido reducir los poderes de la unidad, sin embargo los manifestantes han pedido que se desmantelen, ya que consideran que la conducta de estos oficiales es una extensión de la impunidad de la que disfrutan las fuerzas de seguridad.