La jornada de hoy ha transcurrido entre los detalles sobre el gasto público de la Generalitat y una lección sobre la no violencia por parte de los primeros peritos, entre quienes han destacado cuatro funcionarias de Hacienda que han reactivado las dudas de malversación que hay sobre varios acusados.

LA FRASE: "La obligación de pago existe en el momento en que existe un encargo del servicio, prestación del servicio o buena fe del contratista y así se entiende realizado el gasto, con independencia de que haya que reflejarlo en el procedimiento correspondiente".

Lo ha dicho una de las cuatro peritos, pertenecientes al cuerpo de funcionarios de Hacienda, solicitadas por la Fiscalía.

LA IMAGEN: Una muy distinta a la que circuló ayer por todos los medios. Si ayer se pudo ver a cinco acusados en prisión preventiva adquiriendo su condición de parlamentarios en el Congreso y el Senado, con gesto satisfactorio, hoy se ha visto a algunos de ellos especialmente serios.

Sobre todo al exconseller de Acción Exterior, Raül Romeva -especialmente expresivo, negando constantemente con la cabeza y una sonrisa irónica-, y a Jordi Turull, de Presidencia, cuando peritos de Hacienda han desglosado algunos gastos contables que dependían de sus consellerías.

EL PROTAGONISTA: Cuatro mujeres. Todas ellas funcionarias del Ministerio de Hacienda (una abogada del Estado jefe de la subsecretaría de Hacienda), que han hecho que el Supremo se sumergiese hoy en la técnica contable y de gasto público.

Con tono pausado, una a una han ido dando respuestas técnicas y contundentes a las cuestiones que les han formulado las partes en su calidad de peritos, y que a veces han incomodado a algunos de los acusados por malversación, que negaban con la cabeza.

De su declaración se desprende una conclusión, que entienden que "el gasto está realizado independientemente de que haya sido o no pagado".

LA ANÉCDOTA: Se ha producido cuando el presidente del tribunal, Manuel Marchena, ha dado por concluido el interrogatorio de una testigo sin que Vox, acusación popular, hubiese preguntado.

En ese momento, el letrado del partido, Pedro Fernández, ha tomado la palabra para indicar: "Señoría, solo para decir que no hay ninguna pregunta".

Una frase que ha despertado las risas de toda la Sala y por la que Marchena, con gesto sonriente, ha pedido perdón al abogado.

AGENDA: El juicio se retoma mañana a las 9.30 horas con la práctica de más pruebas periciales y las declaraciones de los últimos testigos.