Las autoridades de Israel han arrestado este martes a tres palestinos por su presunta participación en una agresión contra un bloguero saudí que es parte de una delegación de periodistas que ha mantenido encuentros con el Gobierno de Israel.

El bloguero, que comparte opiniones políticas a través de las redes sociales, visitó el lunes la Explanada de las Mezquitas, antes de lo cual fue insultado por varios palestinos que se encontraban en la Ciudad Vieja de Jerusalén, que le lanzaron además sillas de plástico.

En un vídeo compartido en redes sociales se puede ver a los presentes gritándole: 'Ve a rezar a la Knesset (el Parlamento israelí) y no aquí' y 'Vergüenza'.

Mahmud Saud es parte de una delegación integrada por seis personas que ha mantenido reuniones con el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, según el diario israelí 'The Jerusalem Post'. Es el único cuya identidad ha trascendido.

Netanyahu ha destacado en declaraciones durante la jornada que la delegación está integrada por "periodistas de países árabes". "A excepción de uno, ninguno de ellos tiene relaciones formales con nosotros", ha agregado.

"Hablan de cómo muchos en el mundo árabe quieren la paz con Israel, normalizar las relaciones con Israel, viajar a Israel. No siempre son libres de expresarlo y siempre hay oposición de los que quieren evitarlo, pero han expresado ese deseo", ha señalado.

Asimismo, ha dicho que Israel es "el poder irreemplazable en la región" y ha añadido que "no hay otro poder en la región sin cuya presencia y actividad la región fuera a colapsar".

"Sin Israel, sin las cosas que hacemos y las cosas que defendemos y proteger, creo que Oriente Próximo se derrumbaría ante las fuerzas del radicalismo islámico, ya sean las chiíes lideradas por Irán o las suníes encabezadas por Estado Islámico", ha remachado.

Recientemente, el Sindicato de Periodistas de Palestina (PJS) rechazó una invitación del enviado de la Casa Blanca para Oriente Próximo, Jason Greenblatt, para que realizaran una visita a la Casa Blanca.

El PJS señaló en un comunicado que la invitación es un intento "fallido y desesperado" por parte de la Administración estadounidense de ignorar a las autoridades palestinas.

Por ello, recalcó que rechaza y denuncia la "sospechosa" invitación de la Casa Blanca y ha pedido a todos los periodistas palestinos "que rechacen la invitación y se ciñan a la posición del sindicato y de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP)".