La portavoz del PP en el Congreso, Dolors Montserrat, ha defendido hoy que el Gobierno debe cumplir con los compromisos adquiridos con Arabia Saudí, en referencia a la venta de armas, "por el bien de España y de los trabajadores" de los astilleros con los que su partido ha estado "desde el principio".

Aunque, en declaraciones tras la Junta de Portavoces en el Congreso, también ha reconocido que es "muy grave" la información sobre el asesinato del periodista Jamal Khashoggi.

Montserrat ha advertido de que el PP quiere saber "la verdad" sobre este caso porque es un partido que siempre ha defendido la democracia y los derechos humanos y espera que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dé información en su comparecencia de mañana en la Cámara baja sobre la investigación de la muerte de este periodista.

También sobre la información que pueda tener de la UE y la posición del Gobierno al respecto.

Sobre la polémica internacional sobre la venta de armas al país árabe, Montserrat ha remarcado que "el PP desde el principio siempre ha estado al lado de los trabajadores" de los astilleros, que podrían verse afectados por la suspensión de los contratos, y que España "es un país serio" que debe cumplir sus compromisos.

A este respecto, ha reprochado que "el lío lo creó el Gobierno" y, en concreto, la ministra de Defensa, Margarita Robles, mientras que su partido siempre ha mantenido la defensa de los trabajadores de los astilleros de Navantia en Cádiz, Cartagena y Ferrol.

En el mismo sentido se ha pronunciado el secretario general del PP,Teodoro García, en su visita hoy a la feria Fruit Attraction en Ifema, al asegurar que "hay que cumplir los compromisos adquiridos en materia internacional" y "de ninguna de la maneras" pueden verse afectados los trabajadores de los astilleros porque se trata de muchos puestos de trabajo.

En todo caso, ha abogado por esperar al esclarecimiento de los hechos sobre la muerte de Khashoggi porque la vida humana "está por encima de cualquier otra consideración"

Además, ha insistido en que cualquier venta de armas "tiene que respetar los derechos internacionales" pero ha considerado que ya se están respetando porque "hay unos protocolos establecidos".