Las fuerzas de seguridad rusas han imputado a más de 500 personas por haberse saltado las medidas de cuarentena adoptadas para prevenir la expansión del nuevo coronavirus, según el Ministerio de Interior.

La portavoz del Ministerio, Irina Volk, ha explicado que la Policía y la oficina de protección al consumidor, Rospotrebnadzor, controlan si los ciudadanos llegados de otros países cumplen las órdenes administrativas de aislamiento, según la agencia de noticias Sputnik.

Las autoridades rusas han confirmado hasta este jueves 840 contagios de coronavirus y dos fallecidos. A estas dos muertes se sumaría una tercera de la que el Gobierno informó inicialmente para posteriormente aclarar que se había debido a un accidente vascular.