La Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) ha denunciado la "falta de personal y medios" en todas la fronteras de Ceuta y Melilla para ejercer el control fronterizo y ha asegurado que el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales de la Dirección General de la Guardia Civil le ha dado "la razón".
En un comunicado, la AEGC ha manifestado que el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales de la DGCC ha reconocido en un informe que los máximos responsables deben "valorar" la necesidad de "modificar el actual diseño de la valla fronteriza, teniendo en cuenta el grado de organización, agresividad y violencia empleada" de quienes intentan saltarla.
La AEGC ha argumentado que la petición de más medios de autoprotección para los agentes "no era un capricho" porque el informe reconoce que se pone en riesgo "la vida e integridad física de los guardias que intervienen ante la entrada masiva e incontrolada de inmigrantes".
La organización ha afirmado que estos inmigrantes están "organizados" y sus asaltos se producen "en momentos concretos y no en otros porque cuentan con información que les permite conseguir que el mayor número de ellos logre su objetivo".
"Y además -según la AEGC- no les importa el daño causado a terceros y atacan con ácido, excrementos, orín y con todo lo que pueden tener a mano".
La AEGC subraya que el "duro" informe de Riesgos Laborales refrenda sus pretensiones en las fronteras de Ceuta y melilla, por lo que espera que "haga que se pongan manos a la obra y nos den los refuerzos de personal que reclamamos".
La organización pide un mínimo de 200 guardias civiles más, material antidisturbios de autoprotección para cada gente y que se dé otra solución a las vallas, sobre las que indica que "son obsoletas, con casi 20 años de antigüedad e incapaces de frenar los asaltos que protagonizan los inmigrantes".
La AEGC dice que con este informe volverá a llevar al Consejo de la Guardia Civil sus exigencias y pedirá al Ministerio del Interior que "se preocupe" por la seguridad de sus "subordinados".