El ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, ha pedido no llamar "a la alarma, ni al riesgo, ni al peligro", después del envío a Cataluña de policías y guardias civiles antidisturbios como refuerzos ante la posibilidad de incidentes tras conocerse la sentencia del Supremo sobre el 'procés'.

Así lo ha destacado este miércoles en Segovia durante la clausura de la reunión anual de directores de centros penitenciarios y centros de inserción social.

"Hay una coordinación y una cooperación importante seria y firme con los Mossos, que se ha podido observar desde el último año", ha dicho el ministro a los periodistas.

El Ministerio “actúa bajo criterios objetivos de evaluación de los riesgos para establecer los medios precisos y necesarios para garantizar la seguridad y libertad del conjunto de los ciudadanos, no pongamos la venda antes de la herida, seamos un poco serios y no alarmistas”, ha agregado.