La Fiscalía Superior del País Vasco ha incoado unas diligencias para investigar las circunstancias de la muerte de una bebé prematura y las secuelas sufridas por otra por un presunto error médico en el Hospital Universitario Donostia.

El inicio de estas pesquisas por parte del Ministerio Público responde a la petición que el Defensor del Paciente realizó el pasado lunes a la fiscal superior del País Vasco, María del Carmen Adán, para que investigara de oficio este caso, del que ya se ha dado traslado a la Fiscalía de Gipuzkoa para que se encargue de su "tramitación".

Al parecer, a ambas bebés les fue suministrado durante dos días un anestésico en lugar del suero alimenticio que les correspondía. Una falleció y la otra, también prematura, logró sobrevivir pero con secuelas.

El Servicio Vasco de Salud reconoció el cambio de medicamento en un informe que ha entregado a las familias, cuyo abogado ha presentado una reclamación en la que habla de "error injustificable" y reclama una serie de indemnizaciones.

El pasado lunes, la presidenta del Defensor del Paciente, Carmen Flores, calificó de "barbaridad" lo sucedido y reclamó a la Fiscalía vasca que investigara para conocer las circunstancias y si ha habido más bebés afectados.

"Desconocemos si la prescripción medica estaba equivocada o ha sido la Enfermería la que ha cometido el error", indicó Flores, quien tachó de "imperdonable semejante" fallo.

En un nuevo comunicado emitido hoy, el Defensor del Paciente ha agradecido a la Fiscalía "la rapidez y diligencia en la tramitación" de este asunto, en el que confía "que se haga justicia, por los bebés" afectados y sus padres, y que asuntos como este "no pasen más". EFE