El Gobierno de Estados Unidos ha anunciado este jueves sanciones contra cuatro ciudadanos rusos con lazos con el Kremlin a los que acusa de llevar a cabo esfuerzos para interferir en las elecciones presidenciales que se celebrarán en noviembre en el país norteamericano.

El Departamento del Tesoro ha indicado que entre los sancionados figura Andri Derkach, quien "mantiene lazos cercanos con los servicios de Inteligencia rusos e intentó influenciar la opinión de votantes estadounidenses a través de una campaña encubierta dirigida por Rusia".

Así, esta campaña estaría centrada en "manipular el proceso político estadounidense para hacer avanzar los intereses malignos de Rusia en Ucrania", tal y como ha señalado el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo.

Los otros tres sancionados --Artem Lifshits, Anton Andreyev y Darya Aslanova-- estarían vinculados a una 'granja de trolls' llamada Internet Research Agency, conocida también como Lajta Internet Research, dirigida por el oligarca Yevgeni Prigozhin.

"Esta acción envía una señal clara: Estados Unidos no dudará a la hora de usar todas las herramientas de su poder nacional para responder a los actores extranjeros que buscan interferir o influir en nuestras elecciones a través de cualquier vía", ha zanjado Pompeo.

Oficiales de Inteligencia estadounidenses alertaron en febrero de que Rusia pretende interferir en las elecciones previstas para 2020 y que uno de sus objetivos es ayudar a la reelección del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

El fiscal especial Robert Mueller analizó la presunta injerencia de Rusia en las elecciones de 2016. El informe de Mueller desligó al presidente norteamericano de los supuestos intentos de Moscú por influir en las elecciones de 2016, pero apuntó hasta diez ocasiones en las que Trump pudo obstruir las investigaciones. El presidente ha intentado presentarse como una víctima en todo este proceso.