El Gobierno de Estados Unidos ha mostrado su "indignación" tras el nuevo ataque con proyectiles ejecutado el lunes contra la 'Zona Verde' de la capital de Irak, Bagdad, que se saldó sin víctimas, una semana después de la muerte de un contratista estadounidense en un ataque similar en la ciudad de Erbil.

"Estamos indignados con los últimos ataques", ha dicho el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Ned Price, quien ha resaltado que "no hay mayor prioridad que garantizar la seguridad y el bienestar del personal y los ciudadanos estadounidenses, así como la seguridad de las instalaciones".

"El pueblo iraquí ha sufrido desde hace demasiado tiempo este tipo de violencia y esta violación de su soberanía", ha manifestado, antes de recordar que el ataque en Erbil "causó daños a civiles y las fuerzas de la coalición", si bien ha rechazado atribuir responsabilidades por el momento.

La autoría del ataque en Erbil, capital de la región semiautónoma del Kurdistán iraquí, fue reclamada por el grupo Saraya Auliya al Dam (Guardianes de la Sangre), quien aseguró que el objetivo era la "ocupación estadounidense", sin presentar pruebas sobre su papel en el mismo.

Sin embargo, Price ha señalado durante su rueda de prensa diaria que Washington "hace responsable a Irán de las acciones de sus socios que atacan a estadounidenses". "Puedo agregar que los cohetes disparados en los recientes ataques (...) son fabricados y entregados por Irán", ha detallado.

Price ha apuntado por contra que la respuesta será "calculada", "utilizando una mezcla de herramientas" y "en un momento y lugar" elegido por Washington. "No atacaremos de forma repentina y nos arriesgaremos a una escalada que juegue a favor de Irán y contribuya sus intentos de desestabilizar Irak aún más", ha argüido.

Por último, ha incidido en que "cualquier respuesta será llevada a cabo en coordinación con los socios iraquíes y con la coalición". Las palabras de Price han llegado después del impacto de dos proyectiles en la 'Zona Verde' y otro más en los alrededores, según la agencia iraquí de noticias NINA.

Por su parte, el portavoz del Departamento de Defensa de Estados Unidos, John Kirby, ha señalado que "es difícil decir con certeza si hay un cálculo estratégico" detrás de los recientes ataques o "si es una continuación del tipo de ataques vistos en el pasado".

"Estamos aquí para hacer frente a Estado Islámico, a invitación del Gobierno iraquí", ha recordado en rueda de prensa. "Nuestros comandantes, al igual que los comandantes iraquíes, tienen derecho a la defensa propia", ha advertido.