Un hombre de 40 años ha sido detenido en Valladolid por falsificar recetas de un medicamento cuyo principio activo se usa para hacer droga, para lo que utilizó el sello sustraído a una doctora de Madrid y un talonario de prescripción farmacológica de un centro de salud de Castilla-La Mancha.

Según ha informado la Policía Nacional a través de un comunicado, la detención se produjo después de que los agentes fueran alertados por la empleada de una farmacia situada en el barrio de La Rubia, en Valladolid, de que había entrado un hombre con recetas falsas para adquirir Ritrovil.

Tras entrevistarse con la trabajadora de la farmacia, los agentes realizaron una batida por la zona y localizaron y detuvieron al presunto autor de esas recetas falsas, que tras pasar a disposición judicial quedó en libertad con cargos.

En la investigación, la policía averiguó que el pasado junio una doctora de la Comunidad de Madrid había denunciado el robo de su sello médico y que el talonario de recetas procedía de un centro de salud de Castilla-La Mancha.

El hombre tenía varias recetas falsas y más de 300 comprimidos de ese medicamento, una benzodiacepina que tiene como principio activo el clonazepam, que se usa como ansiolítico y relajante muscular, ha detallado la Policía Nacional en el comunicado.

Además ese principio activo se usa para junto con otras sustancias, como el hachís en polvo, elaborar la droga conocida como karkubi, una "droga muy popular consumida en los estratos más desfavorecidos de Maruecos, donde se vende a precio muy superior al del medicamento".

Por ello, según las mismas fuentes, en los últimos años son frecuentes las redes y organizaciones que tratan de conseguir el medicamento mediante recetas falsificadas, como ha sido el caso.