La Policía Nacional ha detenido por un delito de maltrato animal en Almería a un hombre de 34 años que presuntamente se dedicaba profesionalmente a la cría de gallos de combate.

La Comisaría Provincial de Almería ha informado en una nota de que en el interior de una parcela rústica los agentes hallaron 60 gallos de pelea, dos de los cuales tuvieron que ser sacrificados por los veterinarios dada la gravedad de las lesiones y mutilaciones que presentaban.

Han precisado que la llamada de auxilio de un varón que manifestaba haberse cortado con una botella requirió la presencia de una dotación de la Policía Nacional, pero las indagaciones sobre la verosimilitud del accidente llevaron a los agentes hasta una finca situada en el Pasaje Flor Indálica, una de cuyas construcciones les llamó la atención.

En su interior había un reñidero, sesenta jaulas -cada una de ellas con un gallo- y un frigorífico con fármacos veterinarios, jeringas, tijeras, limas y una báscula.

Los gallos tenían las crestas cortadas y los espolones afilados. Dos de ellos presentaban heridas de gravedad, con laceraciones en el pico, cuerpo y patas, mutilaciones, y pérdida de ojos.

En el suelo se hallaron restos de plumas y sangre fresca.

Ante la gravedad de la situación, la Unidad Adscrita de la Policía Nacional en Almería especializada en medio ambiente realizó una inspección en el lugar y levantó un acta por la numerosas irregularidades presenciadas.

Los gallos malheridos fueron trasladados hasta el centro zoosanitario de Almería pero fueron sacrificados al no ser viable su supervivencia por las heridas producidas.

El responsable de lugar y de los animales fue arrestado por la Policía Nacional acusado de un delito de maltrato animal.

Pese a referir en todo momento que contaba con autorización administrativa para la cría y duelo de gallos, y que de ello hacía su actividad profesional, no pudo acreditar documentalmente ninguno de los extremos.