El presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha reafirmado este sábado "la legitimidad de la lucha no violenta y de la desobediencia civil como instrumentos para transformar la sociedad", en una carta enviada desde la cárcel de Lledoners (Barcelona) a los socios de la entidad.
"Precisamente por eso los poderes del Estado condenan la protesta y la libertad de expresión", y ha reclamado transformar la indignación colectiva en motor de cambio, ha informado este sábado Òmnium Cultural en un comunicado.
Para Cuixart, "la lucha por la autodeterminación y la república catalana sigue siendo el único horizonte compartido de futuro, también para fortalecer los derechos sociales y no dejarse a nadie en el camino".