El conseller de Interior, Miquel Buch, ha fichado como asesor en materia de seguridad al escolta de los Mossos d'Esquadra que acompañó al expresidente catalán Carles Puigdemont en Bruselas, donde ejerció como guardaespaldas durante sus días de vacaciones, estando fuera de servicio.

El Diario Oficial de la Generalitat (DOGC) publica hoy el nombramiento del mosso, Lluis Escolà, como personal eventual del departamento de Interior, a partir del próximo 30 de julio, como asesor en materia de sistemas de seguridad.

Escolà acompañó fuera de servicio a Puigdemont a Bruselas, donde ejerció como escolta del expresidente catalán en su estancia en esa ciudad tras su huida de la justicia española.

Según especifica la resolución de nombramiento, Escolà tendrá como funciones asesorar a Buch en la implantación y el diseño de sistemas de seguridad corporativos, en materia de prospectiva y explotación de información para la toma de decisiones en el ámbito de la seguridad y en relación con la mejora de los sistemas de seguridad institucionales.

También asesorará al conseller de Interior a la hora de coordinar las acciones relativas a la participación en proyectos de investigación, desarrollo e innovación en materia de seguridad y en materia de cooperación multilateral y de coordinación institucional en sistemas de seguridad.

Otra de las atribuciones del nuevo asesor de Buch será aconsejar al conseller en relación con los sistemas de seguridad corporativos de otros países e instituciones internacionales, en la definición de estrategias corporativas de seguridad, su planificación y su control y ejercer cualquier otra tarea que le sea encargada relacionada con sus funciones.

Para el nuevo cargo, el mosso tendrá una retribución correspondiente a un funcionario del grupo A, subgrupo A1, nivel de destino 28 (unos 35.000 euros anuales), con horario de dedicación especial y un complemento específico de 34.945 euros anuales.

Durante la etapa del 155, la División de Asuntos Internos (DAI) de los Mossos d'Esquadra abrió un expediente a este agente por haber utilizado sus vacaciones para estar al servicio de Puigdemont en Bélgica.

Según la investigación interna, el escolta estuvo en Bélgica al servicio de Puigdemont consumiendo los días de vacaciones no disfrutados con los que aún contaba.