La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha considerado "una buena noticia" que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, participe en la reunión de la mesa de diálogo que se celebrará este miércoles en Barcelona, y ha manifestado su deseo de que en ella se hable "de todo", aunque ha precisado que no se dan las condiciones para un referéndum de autodeterminación y no hay que "generar falsas expectativas".

En una entrevista en Ser Catalunya, Colau ha asegurado que, por parte del Gobierno, tanto los socialistas como Unidas Podemos, quienes acuden a la mesa lo hacen con ánimo de sumar, mientras que por parte del Govern (ERC-JxCat) Junts quiere que "no funcione" y "haya polémica".

"Junts busca siempre un motivo para volver a buscar polémica, para discutir, para volvernos a dividir, para señalar. Es tan evidente, tan descarado. (Junts) Le hablan a la gente que no quiere diálogo pero la mayoría de la gente en Cataluña no está aquí, quiere diálogo, soluciones sobre la mesa, política útil al servicio de la ciudadanía", ha asegurado.

Para Colau, en la mesa de diálogo se debería hablar también de "inversiones e infraestructuras" y, en consecuencia, de la ampliación del aeropuerto de El Prat a la que Podemos, los comunes y su entorno se oponen.

"Me gustaría que el president, Pere Aragonès, diga claramente que 'no'" a la ampliación del aeropuerto, ha declarado la alcaldesa, que considera que así quedaría clara la posición de los republicanos y también de la Generalitat al respecto, ya que ERC es el partido mayoritario y Junts el minoritario en el Gobierno de coalición.

Colau ha apuntado que tanto en el Gobierno como en el Ayuntamiento de Barcelona, las fuerzas que gobiernan en coalición discrepan sobre esta ampliación y decide quien tiene la mayoría, PSOE en Madrid y BComú en Barcelona.

En este sentido, ha insistido en que el PSOE y quienes apoyan la propuesta de ampliación del aeropuerto practican el "negacionismo climático" y "hay mucha mentira en torno al beneficio económico de esta ampliación".

La alcaldesa ha asegurado que en Barcelona hay un "acuerdo de discrepancia" entre comunes y socialistas por lo que sus diferencias respecto al futuro del aeropuerto no lo pone en crisis y ha insistido en que la "última palabra" la tiene ella y es "no" a la ampliación.