El director del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) del Ministerio del Interior, Manuel Navarrete, ha advertido de que el yihadismo sigue siendo la principal amenaza para la seguridad y de que no hay que rebajar la tensión aunque España lleve varios años sin atentados.

El general de la Guardia Civil Manuel Navarrete ha participado este martes en el curso de verano de la Universidad Complutense en San Lorenzo de El Escorial (Madrid) organizado por la Fundación Víctimas del Terrorismo y el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo.

Manuel Navarrete ha comentado que a pesar de la presión terrorista y de la pandemia por el coronavirus sigue habiendo coordinación europea y hay una respuesta suficiente en este ámbito, pero ha estimado que hay que "mantener los recursos y la tensión pues la amenaza sigue estando ahí".

"Parece que en España afortunadamente en los últimos años la estamos conteniendo, pero somos muy conscientes de que evoluciona", ha dicho, y ha valorado en este sentido la presión de las Fuerzas de Seguridad españolas y su experiencia en este ámbito tras años luchando contra ETA.

El máximo responsable del CITCO ha recordado que en 2020, año en el que se declaró la pandemia, se registró en el ámbito europeo un número similar de ataques terroristas que en 2019, que produjeron más víctimas.

Por ello ha insistido en que "el yihadismo sigue siendo la principal amenaza" pues, de todos los tipos de actuaciones delictivas, "es el que más víctimas produce, el que más capacidad de evolucionar tiene y el que más agresividad a corto plazo puede desarrollar".

Ha indicado que "el terrorismo ha intentado aprovechar la situación de pandemia identificando al COVID-19 con un virus divino y un castigo de Alá pero no han conseguido utilizarlo recurrentemente para propagar sus ideas y ya prácticamente estas alusiones han desaparecido de la retórica yihadista".

Por otra parte ha destacado que el CITCO está prestando atención a la "hipótesis más peligrosa, que es la vinculación del terrorismo con el crimen organizado o que el crimen organizado utilice técnicas terroristas".

"Hemos visto que muchas personas que están vinculadas al terrorismo tienen antecedentes criminales y pescan en el mismo sitio, captan en los mismos caladeros de personas vulnerables", ha señalado el general.

También ha comentado algunos casos de yihadistas que, a su vuelta de Siria e Irak, se han enrolado en grupos criminales como especialistas paramilitares.

Manuel Navarrete ha advertido de la importancia de seguir avanzando en los planes de desradicalización yihadista "que quizá fue un de los hándicap que tuvimos durante muchos años en la lucha contra ETA".

"Nunca hablamos de la radicalización en el ámbito de ETA, siempre hablábamos de los efectos de ETA, pero ahora sí estamos afrontando la lucha contra la radicalización no solo yihadista sino también de cualquier tipo que pueda desembocar en violencia", ha asegurado.

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Ha aprovechado para aclarar que "aunque la actividad de ETA sigue siendo residual la justicia y las Fuerzas de Seguridad siguen todas las pistas por muy frías que estén para esclarecer" todos los casos pendientes.

En este sentido el comisario de la Policía Nacional Jesús Pedrazo ha corroborado: "No nos hemos olvidado de ETA, seguimos teniendo un enfoque policial pues sigue habiendo muchos casos sin resolver, 376".

"Desde Policía y Guardia Civil seguimos trabajando, analizando la documentación que nos entregó Francia, localizando huidos, resolviendo casos y atentos a la disidencia", ha recalcado.