Cientos de mujeres protagonizan este sábado una nueva protesta, por undécimo fin de semana consecutivo, contra el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, para exigir su dimisión al entender que amañó las elecciones presidenciales de agosto.

En pleno aguacero, muchas de las asistentes llevaban paraguas rojos y blancos, los colores de la bandera histórica del país y ahora un símbolo del movimiento de oposición.

Las fotografías compartidas en el portal de noticias Telegram mostraban carteles que decían "Libertad para Bielorrusia", en unas protestas que se están repitiendo en otras ciudades del país.

Esta misma semana el Parlamento Europeo ha pedido en una resolución que la UE congele las relaciones con Bielorrusia hasta que se repitan las elecciones, apuntando a que la líder opositora Svetlana Tijanovskaya es la presidenta electa "a ojos de los bielorrusos".

Las recomendaciones aprobadas con 602 votos a favor, 44 en contra y 44 abstenciones reclaman que las negociaciones entre la UE y Bielorrusia para establecer las prioridades de su asociación sean suspendidas hasta que se celebren nuevas elecciones presidenciales "libres y justas".

Además ha señalado que Tijanovskaya recibió, según estudios independientes, más de la mitad de los votos en los comicios y, como tal, es considerada la presidenta electa por los bielorrusos. Igualmente la resolución reconoce al Consejo de Coordinación, órgano opositor para ordenar la transición democrática, como la representación legítima del pueblo bielorruso.