La alcaldesa de Chirivel (Almería), Emma Sola, ha informado hoy de que ha solicitado la declaración de zona catastrófica para poder hacer frente a los daños causados por la lluvia y granizo en su término municipal.

En declaraciones a Efe ha explicado que hasta ayer la lluvia y el granizo habían originado destrozos valorados en unos 180.000 euros, a los que ahora hay que sumar los causados por una tromba de agua ayer jueves.

Hasta el momento la mayoría de los daños se habían registrado en caminos y pedanías de Chirivel, como la del Contador, donde la semana pasada hizo estragos el granizo, pero ayer se vio afectado directamente el núcleo principal del pueblo.

"Hemos trabajado intentando que no hubiera daños humanos, el cauce de la rambla pasa por mitad del municipio, que además está en feria y se encuentra lleno de gente. Podemos pasar en estas fechas de 1.500 a 3.000 personas", ha señalado.

Por ello, se han llevado a cabo distintos trabajos que han hecho preciso cortar el tráfico en distintos puntos y ahora limpiar el barro con maquinaria que trabaja para facilitar que los vecinos puedan "salir de sus casas".

Así, aunque el lunes se solicitó formalmente la declaración de zona catastrófica para los puntos menos urbanos del municipio, la regidora ha declarado que se llevará un punto de urgencia al pleno del Ayuntamiento para reclamar que también se incluya en la misma al pueblo en sí.

Sola ha apuntado que anoche la tromba de agua se llevó varios puestos de "vinos, mojitos y patatas", así como "sillas, congeladores y botelleros", entre otros.

Ha añadido que tanto desde la Subdelegación del Gobierno como desde la Delegación del Gobierno de la Junta en Almería han contactado con ella para ofrecer cualquier tipo de ayuda que sea necesaria.

Por otro lado, fuentes de la Diputación de Almería han informado a Efe de que desde la semana pasada parte de su maquinaria se mantiene en Chirivel a petición del Ayuntamiento para hacer frente a cualquier emergencia que pueda surgir.