Tres incendios forestales provocados permanecen activos en Cantabria en zonas altas, sin riesgo para la población, y de difícil acceso para los efectivos y medios terrestres de extinción del fuego.

En total desde las 19.00 horas de ayer Cantabria ha registrado siete incendios provocados en diversos puntos de la geografía regional, según señala el Gobierno autonómico en una nota de prensa.

Además, se mantiene vigilancia permanente sobre el fuego que se produjo ayer en Vega de Liébana para evitar posibles rebrotes.

Durante este sábado el incendio más significativo ha sido el de Rozadío (Rionansa), donde han actuado agentes del Medio Natural y una cuadrilla de bomberos forestales, la BRIF (Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales) de Ruente y el helicóptero del Ejecutivo regional Maya Dama. Se estima que ha afectado a una superficie de unas 60 hectáreas.

El operativo de la Dirección General de Biodiversidad de la Consejería de Medio Ambiente desplegado en situación de alerta en estos días está integrado por 153 agentes del medio natural, 36 cuadrillas forestales, técnicos de guardia y emisoristas, la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF) y el helicóptero Maya Dama.

El Ejecutivo autonómico mantiene activo el nivel de 2 alerta por incendios forestales en las 13 comarcas forestales. Además, están prohibidas las quemas en toda la comunidad autónoma.

El Gobierno ha hecho un llamamiento a la responsabilidad de los ciudadanos para evitar prácticas de riesgo y para que se colabore con las autoridades y avisar de cualquier indicio de fuego o de sus posibles causantes contactando con el 112, con la guardería de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente o con la Guardia Civil.