Las autoridades de Burkina Faso han asegurado este miércoles haber matado a cerca de 50 presuntos terroristas en una operación antiterrorista llevada a cabo el martes en la localidad de Waribéré, situada en el norte del país africano.

El Estado Mayor del Ejército burkinés ha indicado en un comunicado que se lanzó un asalto contra "dos bases terroristas" en la localidad, situada a unos 40 kilómetros de Barani, al tiempo que ha destacado que se saldó con "enormes pérdidas en el bando enemigo".

En este sentido, ha señalado que 47 sospechosos murieron y que una "importante cantidad de materiales" fue "destruida o incautada" durante la operación, en la que también murieron dos gendarmes, según ha recogido el portal burkinés de noticias Infowakat.

La Gendarmería ha detallado que entre el material incautado en la operación en la región de Boucle du Mouhoun --una de las más afectadas por el incremento de los ataques yihadistas-- figuran armas, municiones y 200 litros de carburante.

La operación fue llevada a cabo un día después de la muerte de un militar y tres 'voluntarios' en un atentado ejecutado contra un destacamento militar en la localidad burkinesa de Banh, situada en la provincia de Loroum (norte).

Burkina Faso, al igual que la vecina Malí, ha registrado un fuerte aumento de ataques yihadistas en los últimos años, obra tanto de la filial de Al Qaeda como de la de Estado Islámico en la región.

Dicha actividad ha contribuido también a incrementar la violencia intercomunitaria y ha hecho que florecieran grupos de autodefensa, a los que el Gobierno burkinés ha sumado en los últimos meses a voluntarios para que ayuden en la lucha antiterrorista. Más de 800.000 personas se han visto desplazadas en el país como resultado de todo ello.