El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha anunciado este viernes que ha pedido al secretario especial de desestatalización y desinversión, Salim Mattar, privatizar al menos una empresa estatal "pequeña" a la semana.

Bolsonaro ha reconocido que la privatización no es un proceso fácil y ha hecho hincapié en que "vender" parte de estas compañías requiere autorización previa por parte del Congreso, según ha informado el diario brasileño 'O Globo'.

"No es fácil privatizar. Lo que le he dicho a Salim es: 'Salim, al menos una vez a la semana tienes que hacer ejercicio, ¿verdad?. Una empresa estatal pequeña. Comienza por ahí'. Las más grandes tendrán que hacer frente a un problema: el Congreso brasileño", ha afirmado Bolsonaro.

Por otra parte, el mandatario brasileño ha criticado la gestión de las empresas estatales en los gobiernos anteriores diciendo que eran "focos de corrupción". Concretamente se ha referido a Petrobras y al trabajo del ministro Sergio Moro, a Correos y al sistema de fondos de pensiones público.

Algo que ya hizo Salim Mattar el pasado mes de julio al asegurar que Brasil ya tenía ""134 estatales. La gran mayoría, corruptas. Recuerde Correos, Petrobras, la Casa de la Moneda. En el caso de Correos está Postalis, que compró títulos de Venezuela", argumentó Mattar en declaraciones recogidas por el periódico 'O Globo'.

En cuanto a los fondos de pensiones, Mattar aseguró que el Gobierno ha gastado 100.000 millones (23,2 millones de euros). "Vamos a parar todo eso", subrayó Mattar durante un acto organizado por XP Investimentos en el que dijo que era un "privilegio" estar en el Gobierno para poder impulsar las privatizaciones.