La presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, ha advertido este miércoles de que la mesa de diálogo sobre Cataluña se puede convertir en un elemento que genere "distracción y división" cuando "el clamor masivo de las calles es el de independencia".

Lo ha dicho en declaraciones a la prensa a las puertas del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), donde ha acudido para dar apoyo al expresidente del Parlament Roger Torrent y otros exmiembros independentistas de la mesa antes de su declaración por desobediencia.

La declaración de Torrent y de los exmiembros independentistas de la Mesa se produce horas antes de la reunión de esta tarde de la mesa de diálogo, a la que acudirá el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para intentar desencallar el conflicto catalán, una cita que ha propiciado la crisis más grave dentro del Govern desde la investidura de Pere Aragonès el pasado mayo.

El choque se ha desencadenado por la composición de la delegación catalana en la mesa, ya que JxCat decidió incluir a nombres como Jordi Sànchez y Jordi Turull -indultados por el Gobierno tras haber sido condenados por el "procés"-, mientras que Aragonès se ha negado a aceptar a participantes que no sean miembros del Govern.

Paluzie ha recordado que "la represión no cesa", mientras en el independentismo institucional "se discute sobre cómo tiene que estar puesta la mesa y no sobre qué se servirá en ella", en referencia a la mesa de diálogo.

La líder de la ANC ha advertido de que el independentismo no tiene ningún plan para cuando en esta mesa "se sirvan cacahuetes".

"Nos preocupa de qué se va a hablar en la mesa de diálogo, qué se servirá, cuánto tiempo durará este diálogo de sordos si unos hablan de autodeterminación y los otros llevan cacahuetes", ha ejemplificado.