El secretario de Justicia y Administraciones Públicas del Partido Popular, Enrique López, ha acusado este miércoles al PSOE de mostrar "su peor rostro" y de estar sometido a la radicalización impuesta desde Podemos a la hora de afrontar la renovación del Consejo General del Poder Judicial.

En una entrevista en Las Mañanas de RNE, recogida por Europa Press, López ha asegurado que se debe pedir a los "socialistas que hablan a través de los medios de comunicación" y que se expresan en contra de las decisiones de la actual ejecutiva que "intenten cambiar el rumbo" del partido.

"Que vuelva a la socialdemocracia del siglo XXI y no la de principios del siglo XX", ha sostenido el dirigente 'popular', que ha insistido en que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, continúa poniendo obstáculos semanales que ponen difícil al PP su apoyo para desbloquear la renovación del CGPJ.

"Es cierto que Sánchez y su política cada semana nos genera un nuevo obstáculo. En todo ese contexto se produce el acuerdo con los líderes de Bildu, que están dispuestos a venir Madrid a acabar con el sistema, diciendo que llevan toda la vida hablando con los socialistas, lo de retomar la reforma del delito de sedición*", ha enumerado.

Con todo, López ha recordado que el partido que lidera Pablo Casado continúa "esperando" que desde el Ejecutivo se pronuncien sobre las tres condiciones impuestas por el PP, y que pasan por la exclusión de Unidas Podemos del pacto, la retirada del proyecto de ley para la reforma del CGPJ y el compromiso para la despolitización del órgano.

"El poder judicial es algo muy importante, no podemos jugar con él", ha continuado López, que ha instado al Ejecutivo a que cumpla con los requerimientos del Consejo de Europa y de la Comisión de Venecia, avanzando así al "ideal" y al "espíritu constitucional en que los jueces puedan elegir a los vocales del poder judicial".

Por ahora, ha continuado, el PP no siente la presión, sino "el espíritu constitucional". "Lo que pedimos a Sánchez es que deje de crear esa carga de obstáculos que inició en enero con una bofetada al sistema judicial nombrando a Dolores Delgado como Fiscal General del Estado después de haber sido ministra de Justicia y diputada", ha zanjado.