El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, habría ofrecido al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, el indulto a cambio de que desvinculara al Gobierno ruso de la filtración de correos electrónicos del Comité Nacional Demócrata poco antes de las elecciones presidenciales de 2016, según ha informado este miércoles su abogado, Edward Fitzgerald.

Las declaraciones del letrado, que se han producido ante el Tribunal de Magistrados de Westminster, han tenido lugar antes de que comience oficialmente la batalla legal de Assange para evitar ser extraditado a territorio estadounidense, donde está acusado de filtrar y difundir miles de documentos clasificados sobre las guerras de Irak y Afganistán.

Assange ha participado en la vista judicial celebrada este miércoles a través de una videoconferencia desde la prisión de Belmarsh, donde se encuentra encarcelado desde que Ecuador le revocó en abril de 2019 el asilo y fue detenido por violar los términos de la libertad condicional que le concedió Reino Unido en 2012.

Otra de sus abogadas, Jennifer Roinson, ha explicado que el excongresista republicano Dana Rohrabacher acudió a la Embajada de Ecuador a ver a Assange, a quien le dio instrucciones de parte del presidente y le ofreció el indulto si decía que Rusia no tuvo nada que ver en las filtraciones del Comité Nacional Demócrata. Dicha visita habría tenido lugar en agosto de 2017.

La jueza de distrito Vanessa Baraitser ha señalado que las pruebas son admisibles, según informaciones del diario británico 'The Guardian'.

La portavoz de la Casa Blanca, Stephanie Grisham, ha aseverado que el presidente "prácticamente no conocía a Dana Rohrabacher más que como mero excongresista". "Nunca ha hablado con él sobre este asunto ni sobre cualquier otro tema", ha manifestado.

"Se trata de una mentira. Es otro fraude y otra mentira proveniente del Comité Nacional Demócrata", ha insistido Grisham.

Sin embargo, Trump sí que invitó a Rohrabacher a la Casa Blanca en abril de 2017 después de verlo en la cadena Fox, donde había defendido al presidente. En septiembre de ese mismo año la Casa Blanca confirmó que el excongresista había llamado al entonces jefe de Gabinete, John Kelly, para hablar de cómo gestionar el caso de Assange.