Los reyes y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, han protagonizado esta tarde el tradicional posado veraniego en Palma ante los medios gráficos, con la novedad de que ha vuelto a ser en el Palacio de Marivent, en una parte del jardín, después de que el pasado año fuera en el Palacio de la Almudaina.

Los cuatro han estado con los medios durante unos diez minutos, en los que ha habido ocasión de hacer preguntas a Felipe VI sobre la situación política o a la reina sobre su impresión de Mallorca después de quince años veraneando en la isla, a lo que ha respondido que "cada año mejor".

De forma puntual, a las 19.00 horas, han aparecido por la parte alta de los jardines, con don Felipe y su primogénita cogidos de la mano y, a su lado, la reina y su hija menor.

Tras saludar a los periodistas, se han situado en la zona escogida este año como decorado, distinto al de los otros años en Marivent, con un fondo en el que se veían diversas flores, palmeras, yucas, chopos o adelfas.

De pie en el césped, los cuatro han posado sonrientes y distendidos ante el aluvión de flashes que no ha cejado.

Como en los últimos años, el posado ha tenido entre sus focos de atención a la princesa de Asturias, que el 31 de octubre cumplirá 14 años, y la infanta, que tiene 12, aunque es ligeramente más alta.

Fieles a su estilo, don Felipe y doña Letizia han estado pendientes de sus hijas con gestos de cariño, caricias y comentarios para insuflarles confianza ante la maraña de periodistas congregados.

Con ese fin, la reina ha intercambiado su posición con don Felipe para situarse al lado de la princesa y arropar también a la hija menor.