La vicepresidenta tercera del Gobierno, Yolanda Díaz, ha aseverado que las balas que recibieron anteayer el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, y la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, no iban solo contra ellos, iban contra la democracia, y ha llamado a votar el 4 de mayo contra la política del odio y el "fascismo".

La también ministra de Trabajo y Economía Social ha insistido en que la postura de Vox al dudar sobre esas amenazas de muerte lo que llevó al candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid Pablo Iglesias a abandonar un debate radiofónico- supuso que se diera un paso más en la campaña electoral, que ha cambiado de signo y no volverá a ser la misma.

La salida del debate por parte de Iglesias precipitó, después, la marcha de sus homólogos de PSOE y Más Madrid, Ángel Gabilondo y Mónica García, y la posterior suspensión de otros dos debates electorales.

Tras estos acontecimientos, Díaz ha dicho que ahora Unidas Podemos puede ganar y ha insistido en llamar especialmente al voto a los trabajadores y, especialmente, a los sindicatos, que deben organizar a la clase trabajadora porque se están jugando sus derechos.

La vicepresidencia tercera ha puesto el acento en que hay que tomarse en serio Madrid porque está en juego la igualdad, mientras la derecha y ultraderecha están haciendo política desde el odio y quieren hacernos desiguales.

Por ello, ha insistido en que lo que sucedió este viernes fue muy triste y muy duro, pero Unidas Podemos debe hacer campaña alegres y combativas.

Por su parte, el candidato de Unidas Podemos a la Presidencia regional madrileña, Pablo Iglesias, ha dicho este sábado que su marcha del debate radiofónico, y lo que desencadenó, supuso el clic para que cientos de miles de personas vieran las orejas al lobo", dijeran hasta aquí y señalasen y plantasen cara al fascismo.

En consecuencia, eso ha hecho que el resto de partidos progresistas y los medios de comunicación hayan tomado nota y hayan decidido moverse en la misma dirección.

En este sentido, ha abundado en que lo que hizo Unidas Podemos al abandonar el debate no fue lo importante, sino que lo trascendente y lo que ha hecho cambiar la actitud de los otros partidos progresistas es que miles de ciudadanos dijeran en redes sociales que la democracia estaba en peligro.

En este sentido, ha sostenido que los candidatos de PSOE y Más Madrid, Ángel Gabilondo y Mónica García, no decidieron abandonarlo hasta que sus asesores les informaron, en un receso, de que miles de personas estaban denunciando en redes sociales que la democracia estaba en peligro y no se puede estar sentado en una mesa con el fascismo y la ultraderecha.

Fue por la gente, no por mí que el debate de este viernes fue trascendente, ha insistido Iglesias.

En este sentido, ha lamentado que muchas personas se les echaran encima cuando hace dos años Unidas Podemos lanzó una alerta antifascista, porque todavía no habían comprendido lo que venían, pero ahora sí lo han comprendido.

Por otro lado, ha acusado a los partidos de derecha y ultraderecha la nueva derecha trumpista formada por Ayuso y Vox- de pretender acabar con los derechos conseguidos; y ha zanjado que Vox es el inconsciente desatado del PP.