Si no hay un cambio de tendencia, de aquí a marzo podrían cerrar uno de cada dos salones de peluquería y estética según cifras del sector. Esto supondría que unos 18.000 establecimientos bajarían la persiana para siempre. En 2020 ya lo han hecho unos 10.500, lo que supone casi un 22% del total.

No es fácil soportar una caída de facturación del 40%, algo que ni tan siquiera se ha conseguido remontar durante las fechas navideñas, uno de los picos de actividad más importante del año para un sector como éste que cerró el pasado año con pérdidas de 1552 millones de euros. Esto, lógicamente, se ha traducido en la destrucción de puestos de trabajo. Serían unos 52.000, el 48% del total, según cálculos de las pymes que se dedican a esta actividad.

Juan Carlos, al frente de una peluquería de Tarrasa, nos cuenta que él, de momento, está aguantando, pero cada vez es más difícil. Tiene seis trabajadores y a cuatro de ellos los tuvo que acoger a un ERTE cuando se decretó el confinamiento. Después, con la llegada de la “nueva normalidad” vino un pico de trabajo porque las peluquerías fueron declaradas actividad esencial, pero “ese efecto se desvaneció a las pocas semanas”.

Juan Carlos se muestra preocupado porque “en abril de 2020 pidió un préstamo ICO de 20.000 euros para hacer frente a los gastos y sobre todo para mantener los empleos. "De momento sólo estoy pagando intereses, pero en marzo tengo que empezar a pagar también la deuda y si no hay moratorias lo vamos a tener muy difícil porque la actividad no parece que vaya a remontar”, señala a COPE. A todo esto, nos señala Juan Carlos, hay que añadir la subida de las cuotas para los autónomos y el encarecimiento de la factura de la luz por la ola de frío. Por lo menos, Juan Carlos ha tenido suerte con el dueño del local que, aunque completa la pensión con esa renta, ha sido flexible y ha negociado una flexibilización de las cuotas del alquiler.

Desde el sector piden al gobierno un plan de choque que comience con la rebaja del IVA del 21 al 10% y s lo que pedirán el próximo miércoles 20 de enero en una manifestación por 77 ciudadanos españolas.