El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado este martes que el plan para reformar el sistema de pensiones no elevará la edad legal de jubilación, este año en los 66 años, sino la edad efectiva, que se encuentra cerca de los 64,5 años.

Durante su comparecencia posterior al Consejo de Ministros, el presidente del Gobierno se ha referido así al paquete de medidas anunciado ayer por el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, en el Congreso de los Diputados, que ha considerado "muy positivo".

El presidente ha abogado por introducir incentivos para "elevar la edad efectiva de jubilación, no alargarla, sino alinearla con la legal", con el objetivo de lograr la sostenibilidad del sistema.

"Vamos a ver qué eco tienen en el Congreso y con los agentes sociales" estos incentivos planteados ayer por Escrivá en la Comisión Parlamentaria del Pacto de Toledo, ha dicho Sánchez.

El presidente ha recordado también que hay un compromiso del Gobierno y de las fuerzas parlamentarias para que los pensionistas no pierdan poder adquisitivo, indexando la revalorización de sus pensiones al IPC, modificar el factor de sostenibilidad y hacer que los autónomos coticen por sus ingresos reales.

También en este ámbito, Sánchez ha recordado los incentivos a los planes de pensiones de empresas, para que sean más progresivos y eficientes que los actuales.

"Este es el primer paquete de reformas que vamos hacer y que cuentan con un consenso amplio dentro del Gobierno y de los grupos parlamentarios porque se localizan claramente las conclusiones de Pacto de Toledo", ha asegurado el presidente.

El objetivo de estas propuestas, ha dicho Sánchez, es "garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones y la dignidad de las jubilaciones de nuestros mayores". EFE