El pleno del parlamento autonómico asturiano ha aprobado hoy una declaración institucional de rechazo a la decisión de la multinacional del aluminio Alcoa de cerrar sus plantas de Avilés y A Coruña, que emplean a 686 trabajadores.

La declaración rechaza el cierre de la planta de Avilés y pide a la dirección de la empresa que rectifique su decisión y que demuestre su compromiso con Asturias, a la vez que muestra su oposición al proceder de la compañía, "que en momento alguno avisó de sus intenciones".

Además, insta y respalda al gobierno regional para que tome las iniciativas necesarias ante la dirección de Alcoa para que desista de una medida que conllevaría la pérdida inmediata de más de 300 empleos directos y "un duro golpe" para la pujanza industrial de la comarca donde la empresa está arraigada desde hace más de medio siglo.

El parlamento asturiano insta además al ejecutivo regional a exigir la intervención "inmediata y urgente" de los ministerios de Industria y de Transición Ecológica para revertir el anuncio de Alcoa, sobre unas instalaciones "que constituyen todo un referente mundial en cuanto a la calidad de la producción".

Asimismo, traslada su apoyo y solidaridad a la plantilla, a sus familias y a las personas afectadas, que hace extensivo a la de A Coruña, y pide al gobierno asturiano que lidere ante el Ejecutivo central estas medidas en favor del mantenimiento de la industria metalúrgica española y, en especial, de Asturias.

Además de los representantes sindicales, que tras el pleno se reunirán con el presidente del Principado, Javier Fernández, la sesión ha sido seguida desde la tribuna de invitados por trabajadores de la empresa, y otras autoridades.