La patronal de comercio de Pimec ha afirmado hoy en un comunicado que las ventas en los sectores del comercio y la restauración de Barcelona han descendido un 30 % durante la huelga de taxistas debido a la afectación de Gran Via y Passeig de Gràcia por las movilizaciones.

Esta situación, según la entidad, "pone de manifiesto la mala imagen internacional que está dando la ciudad", y ha alertado de que las protestas de los taxistas "están perjudicando" a los consumidores, a los comerciantes y al sector de la restauración de la ciudad.

Por este motivo, Pimec ha manifestado la necesidad de encontrar "rápidamente" una solución y se ha posicionado a favor de "un modelo que respete los derechos de los taxistas, pero no por encima de los derechos de los ciudadanos ni de otros colectivos económicos".

Los taxistas aprobaron ayer en asamblea ofrecer servicios mínimos como un "gesto de buena voluntad" hacia la ciudadanía, a la espera de la decisión del Ministerio de Fomento, que en este momento tiene en sus manos la desconvocatoria de la huelga.

En este sentido, Pimec ha pedido a Fomento y a las diferentes administraciones competentes que "velen por el respeto del espacio público" y se comprometan a dar una solución "rápida" que evite la competencia desleal y no ponga en peligro a sectores como el comercio catalán.