El índice Ibex 35 arranca el día en 8.710 puntos, con una mejora del 0,9 por ciento. Suben todos los grandes valores, en especial os bancos, a los que beneficia el horizonte de tipos de interés más altos en Europa. La presidente del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, cree que no habrá recesión en la zona por lo que mantiene su intención de elevar el precio del dinero. Lo hará con toda probabilidad en julio y también en septiembre.

Los mercados pasan por alto referencias tan negativas en el ámbito geoestratégico como las nuevas pruebas de misiles balísticos en Corea del Norte, como las maniobras militares de China cerca de Taiwán o como las que llegan desde Ucrania. El presidente Zelensky ha confirmado que se han detenido las conversaciones con Rusia. Ucrania luchará hasta recuperar todo su territorio. Algunas voces ya advierten de una hambruna en numerosos países si Ucrania no consigue dar salida a sus cosechas de grano por los puertos del país.

Hoy los inversores tienen una cita con las actas de la última reunión del Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal de Estados Unidos, -el FOMC por sus siglas en inglés-, que es el organismo que dirige la política monetaria del país. En esa reunión, la del día 4 de mayo, la Reserva elevó el precio del dinero en medio punto, hasta la banda del 0,75 al 1 por ciento. Es, hasta el momento, su mayor subida en un día de los últimos 22 años. Además, el banco central estadounidense acordó reducir progresivamente su abultado balance.

Esta tarde se conocerán también las peticiones de bienes duraderos en Estados Unidos y los inventarios de petróleo y carburantes.

En Europa la referencia hoy es el dato de PIB de Alemania. La economía alemana ha repuntado dos décimas en el primer trimestre, frente a la contracción de un 0,3 por ciento en el trimestre anterior. Alemania crece a un ritmo anual del 4 por ciento anual. Es una cifra que ha gustado, aunque no ha sorprendido al mercado. El Fondo Monetario Internacional pronostica una suave recuperación de la economía alemana, pese al incierto decorado internacional. Nadie olvida que la elevada inflación y las subidas en los tipos de interés incrementan el temor a un severo enfriamiento del crecimiento económico, cuando no una recesión en toda regla en algunos países. El mayor lastre para las economías y para los mercados es la escalada de la inflación por el aumento del precio de la energía y el estrangulamiento de algunas cadenas de suministros internacionales.

Por su parte, el Banco Central Europeo dará a conocer su informe de estabilidad. Dentro de casa, se ha publicado el índice de precios industriales que crece a un enfebrecido ritmo anual del 45 por ciento.

En los demás mercados, llama la atención el nuevo repunte en el precio del petróleo. El crudo del Mar del Norte se paga esta mañana por encima de 111,5 dólares por barril. Y destaca también la recuperación el euro en el mercado de divisas. Se consolida en 1,07 dólares. La subida del euro hace más llevadera la factura energética, que se paga en dólares en los mercados internacionales. La contraparte es que la subida del euro dificulta las exportaciones de las empresas europeas.

En las criptomonedas el Bitcoin continúa de capa caída por debajo de 30.000 dólares. Y en el mercado secundario de deuda pública bajan los precios y suben las rentabilidades. El rendimiento de los bonos de EEUU a diez años ha pasado del 3 por ciento hace pocos días al 2,74 por ciento de hoy. El “bund" alemán con el mismo vencimiento se aleja del 1 por ciento, mientras las obligaciones españolas han pasado en pocas horas del 2,13 al 2,07 por ciento. El oro sube hasta 1.860 dólares por onza, pero sigue lejos de los 1.900 que alcanzó a comienzos de mes.